Sólo la medida de gracia del rey más rico del mundo podría salvarla. La tobarreña Nieves García Alcaraz sueña con que algún día el rey Bhumibol de Tailandia le conceda el indulto y pueda salir de la cárcel de Bangkok donde lleva seis años entre rejas, cumpliendo la cadena perpetua a la que fue sentenciada tras ser pillada en el aeropuerto con 3,1 kilogramos de metanfetamina en cristal.