Lluvias sobre mojado que complican la vendimia

A.G
-

El agua acumulada y los arrastres de tierra en caminos impiden el acceso a las plantaciones de varios municipios, donde se teme que los hongos afecten a la uva

Llovió sobre mojado para los viticultores de La Manchuela. La situación provocada por las tormentas del lunes es una de esas en las que la expresión popular cobra especialmente sentido, pues la nueva tromba de agua cayó cuando los agricultores apenas habían podido entrar a sus explotaciones para retirar las uvas dañadas por las precipitaciones de los días 7 y 9 de este mismo mes.   

Las inundaciones retrasarán y complicarán la campaña de vendimia en la zona que, hasta hace unos días, se esperaba buena en cantidad y calidad de la uva. El motivo no es otro que la inaccesibilidad de los cultivos, bien por encontrarse anegados (con agua hasta la altura de los racimos o incluso espalderas volcadas) o porque los caminos están intransitables. «El término está destrozado, con daños de una magnitud que no recordábamos, parcelas inundadas y caminos cortados, que necesitarán meses de faena», así lo expresaba  Enrique Navarro, alcalde de Cenizate, un municipio afectado por todos los últimos  episodios de lluvia y donde unas 500 hectáreas de viñedo ya habían sufrido daños anteriormente.

Allí se registraron el lunes unos 75 litros por metro cuadrado, mientras que la cifra se sitúo entre 80 y 90 en Golosalvo y Fuentealbilla. También se superaron los 50 en otros términos que se vieron afectados, como Casas Ibáñez, Mahora, Navas de Jorquera, Villamalea o Madrigueras.

(Más información en edición impresa)