Los agentes municipales recibieron a las 7,30 de la mañana un aviso que alertaba de que se escuchaba llorar a unos niños en una vivienda. Los policías se personaron en la casa y encontraron a dos niños de seis y cuatro años solos. Se activó el protocolo, los menores fueron atendidos y los hechos se pusieron en conocimiento de los Servicios Sociales. La Policía trasladó lo sucedido a la Fiscalía.