Fue uno de los grandes artistas plásticos que dio Albacete durante la pasada centuria, un creador que cultivaría los más diversos géneros y cuya obra oscila entre el paisajismo castellano de los años 50 y el neoexpresionismo. Ahora, al cumplirse los 100 años de su nacimiento, el Museo de Albacete inauguraba ayer una muestra retrospectiva.