De enero a mayo de 2017 terminaron en la Policía Local 747 objetos perdidos. Carteras y bolsos, documentos nacional de identidad y llaves se llevan el primer puesto de los despistes, aunque incluso han aparecido una dentadura postiza, una pieza ortopédica e incluso una urna funeraria con sus cenizas. Transcurridos dos años y 15 días los objetos se destruyen o se dan al depositario.