Las academias de música llegan a seis de cada 10 municipios

I.M.
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La ofertas y las actividades que ofrecen varía mucho de una localidad a otra, pero todas desde sus inicios fueron viveros para sus Bandas

Las academias de música ofrecen un aprendizaje y una práctica musical que se adapta a las necesidades de los alumnos y a las posibilidades y recursos existentes dentro del municipio, según se recoge en la memoria que elabora el Servicio de Cultura de la Diputación Provincial relativa al 2017.

Las ofertas y la actividades que dan, se recuerda igualmente en la memoria de la Diputación, varía mucho de unos pueblos a otros, pero, en general, todas suponen, añade el diputado de Cultura, Alberto González, sobre todo, en los municipios más pequeños, su más importante entramado cultural y educativo.

Detrás de la mayoría de ellas, por no decir de todas, hay una asociación cultural de índole musical, una sociedad unión musical, o directamente una Banda, por lo que no es de extrañar que, al margen de los correspondientes estudios que se ofrecen de iniciación a la música (lenguaje musical) o de teoría musical, se les enseñe a sus alumnos, a partir de una edad, a tocar instrumentos, pero no unos cualquiera, sino los que forman parte, por expresarlo de alguna forma, de una Banda, sobre todo, instrumentos de la familia de viento y de la familia de percusión, es decir, trombón, trompeta, trompa, tuba, bombardino, corneta, flauta, clarinete, requinto, oboe, fagot, bombo, timbales o platillo, entre otros.

Del total de municipios que forman la provincia albacetense únicamente en 30 de ellos no se aprende el pentagrama, o lo que es lo mismo, no se ofrecen enseñanzas no regladas de música fundamentalmente por dos motivos: el primero porque hoy por hoy carecen de Banda y el segundo porque son muy pequeños en términos de población y su población, además, está muy envejecida. Y es que, salvo la capital, o los municipios de Hellín, Almansa, Villarrobledo, La Roda, Caudete, Tobarra o Tarazona, el resto tienen menos de 5.000 habitantes censados, e incluso en lugares como las dos Sierras o comarcas como La Manchuela hay poblaciones con 500 habitantes o menos.

Salvo en la capital y en Almansa, en donde, como es conocido, hay conservatorios, en los municipios en los que no hay academia o escuela de música son: Alcadozo, Alcalá del Júcar, Balsa de Ves, Barrax, Casas de Juan Núñez, Casas de Lázaro, Corral Rubio, Cotillas, El Ballestero, La Herrera, La Recueja, Fuensanta, Golosalvo, Masegoso, Minaya, Montalvos, Motilleja, Paterna del Madera, Peñascosa, Povedilla, Pozo Lorente, Pozuelo, Robledo, Salobre, San Pedro, Vianos, Villa de Ves, Villapalacios, Villavaliente y Viveros.

subvención. En el resto de los municipios las hay y de hecho, 48 de ellas, incluida la de la Entidad Local Menor de Aguas Nuevas, obtuvieron subvención en la convocatoria de 2017 de la Diputación para academias de música, en concreto 79.990 euros en total de los 2.115.120 euros de presupuesto que sumaban entre todas ellas. Los alumnos que se formaron en música el pasado año se elevaron a 4.192 y los profesores encargados de impartir la clases a 233. Más información en edición impresa