La carretera de Agramón a Hellín, que en su trazado del pasado siglo era estrecha y fue reparada y ampliada por la Diputación Provincial en 2003, se ha convertido en un auténtico punto negro del tráfico ya que desde 2012 se han contabilizado cinco accidentes mortales y en los últimos 15 años se han producido 25 accidente graves por la falta de arcén.