En la mañana de ayer, pese al frío reinante, muchos vecinos del municipio fueron llegando a las inmediaciones de la calle de La Parra, con sus respectivas mascotas, preparadas para recibir la bendición del patrón, que el sacerdote, Antonio Pérez, impartió tras oficiar la misa, en la puerta de la iglesia, entre las calles Ramón y Cajal y La Parra, antes de iniciarse el desfile procesional.