El Defensor del Pueblo cerró 2016 con dos asuntos pendientes del Consistorio de la capital albacetense. La institución formuló sendas resoluciones durante el pasado año y no obtuvo respuesta de la administración local, según el primer avance de datos de balance de la actividad anual. La Diputación Provincial y el Ayuntamiento tobarreño sí respondieron a los requerimientos hechos.