El Partido Popular de Castilla-La Mancha presentó ayer, de manera oficial, al albacetense Francisco Núñez como candidato a la Junta de Comunidades y lo hizo en un multitudinario acto en esta ciudad, en el que estuvo arropado por el presidente nacional de esta formación, Pablo Casado, y que sirvió también para presentar a los cinco candidatos a las alcaldías en las capitales de provincia.

De este modo, en los céntricos salones del Casino Primitivo, se dieron cita, junto a Núñez y Casado, los candidatos de las capitales de provincia: Manuel Serrano, por Albacete; Francisco Cañizares, en Ciudad Real; Luz Moya, por Cuenca; Antonio Román, en Guadalajara, y Claudia Alonso, en Toledo.

De todos ellos, Casado ensalzó sus bondades y la cualidad común de «querer» a su tierra y trabajar con «energía» por ella, liderados por Núñez a quien definió como «un crack». Por ello, no tuvo dudas de que el PP tiene «un equipazo» para «salir a ganar» en Castilla-La Mancha y afirmó que, tras la cita con las urnas de mayo, «Núñez será el próximo presidente de Castilla-La Mancha», así como que gobernarán en las diputaciones y en los ayuntamientos de las capitales de provincia.

Casado no dudó sobre que Núñez conseguirá el objetivo pero le advirtió que no lo va a tener «fácil» y que ello se debe a que «tu predecesora te lo ha puesto difícil». De este modo, Casado quiso tener un gesto de recuerdo a la que fuera presidenta de la Junta y de los populares en la región, la albacetense María Dolores Cospedal, de quien el presidente del PP destacó que «ha sido la mejor presidenta de Castilla-La Mancha».

Cospedal no asistió a este acto, en el que ni Casado ni Núñez quisieron pasar por alto la ocasión de recordarla en ‘su’ casa.

Y si algo destacó Casado del candidato del PP a la Junta es que «sabe bien lo que es empezar desde abajo», recordando su trabajo «ya desde Nuevas Generaciones».

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