El 4 de junio del pasado año se encontraba el cadáver de una mujer fallecida por muerte violenta en su piso de la calle Blasco Ibáñez de Albacete capital. Unas horas más tarde se arrestaba al presunto autor del crimen en la ciudad, se trataba de M.R.G., de 34 años de edad y excuñado de la víctima, el cual reconoció los hechos tanto en Comisaría, como ante el juez de instrucción.

Aunque en la actualidad se desconoce la fecha en la que se celebrará el juicio, el abogado de la familia, Martín Pérez Smith, revelaba a La Tribuna de Albacete que acusarán al procesado de un delito de asesinato y de otro de allanamiento y que solicitará la pena máxima por ambos ilícitos. «Vamos a pedir la pena máxima en este caso, porque consideramos que, claramente, es un asesinato y porque además concurre una alevosía y un ensañamiento fuera de lo común, a la hora de cometer el crimen, que es merecedor de la pena máxima, en grado máximo».

En este sentido a lo que al delito de asesinato se refiere, se solicitará una pena de 25 años de prisión, a la que habrá que sumar otra de allanamiento, cuyo máximo se establece en dos años de prisión, lo que supondría una pena total de 27 años de cárcel.

Pérez Smith solicita esta pena ya que está convencido de que el crimen no se cometió de una forma casual. «No es un crimen casual o un momento de enajenación, es una cosa premeditada, larga y buscada».

Según Pérez Smith, la agresión se llevó a cabo para hacer daño a la que era expareja del acusado. «Indiciariamente él manifiesta a lo largo de la causa que su finalidad era hacerle daño a la familia y parece ser que ya iba premeditadamente con anterioridad buscando esa circunstancia o esa situación de una manera u otra».

En cuanto al crimen el abogado de la familia considera que hubo ensañamiento. «Creemos que se produjo un sufrimiento innecesario a la víctima, para causarle la muerte».

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