El servicio de Geriatría del Área Integrada de Albacete acaba de cumplir 25 años de trayectoria desde que se creara en el entonces Hospital Virgen de Los Llanos (hoy desaparecido) de la mano de los doctores Pedro Abizanda, actual jefe de esta especialidad, y Carmen Luengo, con 34 camas de media y larga estancia de hospitalización (entre Geriatría, Medicina Interna y otras especialidades) y una pequeña consulta donde se veían menos de 100 pacientes al año. 

Desde entonces hasta ahora el crecimiento de este proyecto ha sido importante pero siempre sostenible. Sirva como ejemplo que ahora este servicio tiene asignadas 44 camas tanto para agudos como para la unidad de recuperación funcional, un hospital de día y cinco consultas que atienden a más de 10.000 pacientes anuales, recursos todos ellos ubicados en el Hospital Perpetuo Socorro, que se completan con la reciente incorporación hace un año de un Equipo de Continuidad Asistencial (ECA) para dar soporte a Atención Primaria y las residencias de mayores; además de contar con una unidad de investigación que en la actualidad participa en los más punteros ensayos clínicos internacionales en el campo del alzhéimer y otras enfermedades degenerativas.

No obstante, el doctor Abizanda habló de un crecimiento contenido en los últimos años de pacientes atendidos en las consultas de Geriatría, algo que achacó a la puesta en marcha de la ECA y a la  apertura de los servicios de Geriatría de los hospitales de Almansa y Villarrobledo, ya que el de Hellín de momento cuenta con el apoyo un par de días por semana de un geriatra del equipo del Área Integrada de Albacete. Todo ello ha supuesto reducir la cifra de pacientes geriátricos que son derivados a la capital, bien para consulta o ingreso hospitalario.

El 75% de las consultas que los geriatras del CHUA atienden al año son de pacientes con deterioro cognitivo, mientras que otro 10% es debido a caídas y fracturas, lo que significaría que alrededor de un 85% de la patología atendida es degenerativa y el resto es enfermedad crónica reagudizante, que es la que más ingresos genera.

Más ingresos. Por el contrario, el número de ingresos hospitalarios de personas añosas ha crecido en el último año, ya que el servicio tuvo que pasar de contar con 36 camas a 44 al tener índice de ocupación del 150% y pese a ello ahora mismo la tasa de ocupación hospitalaria de Geriatría es del 120%, por lo que a corto o medio plazo, en opinión del responsable del área, deberá contar con más dotación de camas. Así, de 1.600 a 1.800 ingresos por año se ha pasado en 2018 a 2.000.

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