El Espacio Torner reabrió ayer sus puertas al público cuatro años y cuatro meses después de que cerrara ante la imposibilidad de la fundación privada que lo gestiona de sostenerlo con fondos propios. Y lo ha hecho, nuevamente, gracias al respaldo económico del propio Gustavo Torner, que seguirá poniendo dinero de su bolsillo a la espera de que termine de cuajar la implicación de las administraciones, entre ellas la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que se comprometió a reservar una partida económica en los presupuestos generales de 2016 para el museo.

El hecho de que no haya ninguna institución detrás de la reapertura explicaba ayer que ésta se produjera sin un acto oficial de por medio. Ni siquiera el propio artista quería dar mayor importancia a la misma. Tan esquivo como siempre, a primera hora de la mañana no podía ni asegurar  en qué momento del día visitaría el centro de arte para dejarse fotografiar.

En declaraciones a La Tribuna, Torner afirmó que tiene capacidad para seguir manteniendo el Espacio abierto «un año», y «si algunos proyectos privados salen bien este verano, un máximo de tres». No obstante, confía en que antes pueda cerrarse algún tipo de acuerdo que pase por la implicación institucional.

Torner explicó que si no ha dado antes el paso de reabrir el Espacio ha sido porque «confiaba» en que se encontraría una solución distinta a la de seguir aportando recursos propios.

No obstante, recuerda que durante el tiempo que ha estado cerrado también ha sido él quien ha cubierto gastos como los del seguro de las obras. El Ayuntamiento, por su parte, ha pagado la factura eléctrica, lo que ha permitido mantener activas la calefacción y la alarma.

El artista conquense explica que tomó la decisión tras sentir «una gran pena» cuando en el seno del Patronato de la Fundación se le propuso que la única salida que quedaba era la disolución de ésta y el desmantelamiento del centro.

La apertura del Espacio Torner se produce a unos días del inicio de la Semana Santa motivada por la llegada de un gran número de turistas a la ciudad.