Es un negocio seguro para las mafias criminales, considerado el tercero más lucrativo del mundo después del narcotráfico y el tráfico de armas. La trata de seres humanos se fija en el hambre y en la necesidad, en la exclusión, en la vulnerabilidad, en la ignorancia... Explotación sexual, laboral, trasplantes de órganos, matrimonios forzados… son el objetivo prioritario de las organizaciones criminales que delinquen por todo el mundo, inclusive en Albacete, donde la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras del Cuerpo Nacional de Policía desarrolla actuaciones contra el proxenetismo, entre otro gran número de funciones.
Intervenciones policiales que en la última década se han saldado con 73 personas detenidas por un delito de explotación sexual y trata, 32 de las cuales fueron retenidas fruto del desarrollo de 14 operaciones policiales realizadas entre 2015 y 2017. Según datos aportados por la propia Brigada a este diario, en lo que llevamos de año no se ha producido detención alguna, lo que no significa que el problema de la trata con fines de explotación sexual haya alcanzado una magnitud preocupante en todo el mundo.
Lo cierto es que no se pueden comparar las actuaciones de estas mafias en las grandes capitales con provincias medias como Albacete, donde hoy por hoy, apenas un 10% de las mujeres que se encuentran en situación de prostitución pueden estar indocumentadas y ser víctimas del explotación sexual.
«El perfil de las mujeres que ejercen la prostitución en los locales de alterne ha cambiado mucho». Es una constatación del inspector jefe de la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional en Albacete, Rafael Soria. Gran conocedor de la situación del mercado del sexo en esta provincia, explica que si hace unos años procedían de Europa del Este, en la actualidad la gran mayoría de las meretrices -calculan que ejercen unas 200- son originarias de Latinoamérica, con una especial incidencia de paraguayas que empezaron a llegar a los clubes de Cuenca y, con los años, han ido incorporándose a locales de alterne de las provincias de Albacete y Ciudad Real, primero, y del resto de España, después. (Más información en edición impresa)