Agencias / Granada
El socialista Francisco Cuenca se convirtió ayer en el nuevo alcalde de Granada tras casi 13 años de Gobierno popular y después de que presentara su dimisión José Torres Hurtado, que fue detenido en el marco de la Operación Nazarí por su presunta implicación en una trama corrupta en la ciudad.
Como se venía anunciando en las últimas semanas, Cuenca contó, además de con los votos de los ocho miembros de su grupo, con el respaldo de los cuatro representantes municipales de Ciudadanos, los tres de Vamos Granada y el de IU. No prosperó, pese a los intentos del PP, la propuesta de la hasta ahora concejal de Turismo y Participación, Rocío Díaz, para la que no fue suficiente el apoyo de los 11 ediles de su formación.
La elección del regidor se produjo tras el escrutinio de papeletas que la corporación depositó en la Jarra de los Caballeros XXIV, símbolo de la constitución del primer Concejo de la ciudad de Granada, y después de la constitución de la Mesa de Edad, presidida por el corporativo con más años, el concejal de Vamos Granada Luis de Haro-Rossi, y el de menos, el popular Rafael Caracuel.
Granadino de 48 años y padre de dos hijos, Cuenca es portavoz del grupo municipal socialista desde 2011. Diplomado en Educación Física por la UGR, es funcionario de la Junta de Andalucía en excedencia, y tiene un máster en Alta Dirección de Entidades Sociales. Además, ha sido coordinador de la Delegación de la Junta de Andalucía y delegado de Obras Públicas e Innovación en la ciudad.
Originario del populoso barrio de la Chana, el nuevo primer edil entró en política desde el movimiento vecinal, inspirado por su tío, Juan Cuenca, que falleció en 2007 y cuyo nombre el PSOE ha llevado a un premio que otorga cada año a personalidades destacadas por su lucha social.
El nuevo alcalde es, además, un amante de la lectura y de la música independiente y el rock, una de las banderas que defendió en la pasada campaña municipal. También disfruta de las tradiciones, como la Semana Santa, y del deporte. Socio del Granada CF desde niño, es, asimismo, un apasionado del Club Baloncesto Granada.
Cuenca decidió convertirse en la ciudad en 2010, y, aunque había otros aspirantes -José Antonio Aparicio, César Girón o Gabriel Martínez-, la Ejecutiva Municipal del PSOE le dio su respaldo «unánime» para presentarse a las elecciones de 2011 por encarnar «nuevos aires para Granada».
compromiso. Tras ser elegido, el socialista reclamó el «compromiso leal» de todos los grupos, entre los que incluyó al PP, y llamó a expulsar «cualquier atisbo de corrupción» en la ciudad.
«Nuestro trabajo descansa sobre una idea clara: expulsar cualquier atisbo de corrupción, cualquier atisbo de arbitrariedad o mala práctica de este Ayuntamiento. Y para alcanzar ese reto no sobra absolutamente nadie», agregó, señalando que «mis puertas estarán cerradas para quien busque atajos a la legalidad».
Finalmente, Cuenca apeló a «salir juntos de esta difícil situación» y agradeció a IU, Vamos Granada y C’s que hayan entendido que , más allá de cuestiones ideológicas, el cambio de Gobierno era «una cuestión de emergencia».