Innovación y tecnología

I. M.
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Dentro de las empresas instaladas hay de todo; las hay de reciente creación, pero también las hay que llevan desde que el Parque abrió sus puertas

CADE cuenta en estos momentos con 23 trabajadores; la última incorporación de la plantilla es un ingeniero albacetense que trabajó en una plataforma petrolífera en Noruega. - Foto: J. M. Esparcia

Estar en el Parque Científico y Tecnológico de Albacete tiene  un precio mensual en concepto de alquiler. Este abono le cubrirá  a la empresa todos los gastos de electricidad, limpieza de oficina, uso de salas de reuniones, aparcamiento, reparto de correspondencia, centralita telefónica y seguridad. La última empresa que se ha instalado es Redcom Cibernético, aunque también las hay que están desde sus inicios, tal y como es el caso de CADE Soluciones de Ingeniería S.L. cuyo director general y uno de sus socios fundadores es Daniel Berenguel. La que más trabajadores tiene es Vector Software Factory S.L, una empresa  de capital 100% español dedicada a la consultoría, desarrollo y soluciones y que cuenta con seis centros en España, uno de ellos en el Parque Científico y Tecnológico de Albacete.  No obstante, pese a todo, lo que está ocupado hoy por hoy el Parque aún tiene un 30% de su espacio disponible.

El principal atractivo del Parque radica, en palabras de su director, José Luis Patiño, en el entorno de colaboración que se vive y los servicios que se le ofrece. El 50% de las empresas que alberga son de Albacete y el otro 50% de fuera,  sobre todo, de Madrid, que vienen atraídas por la posibilidad que se  les ofrece de tener un producto propio y de contar con unos recursos humanos y tecnológicos altamente cualificados y todo ello, además, a un precio muy competitivos. Estos atractivos y el hecho de que su capital y  socios fuesen albacetenses es lo que hizo que la empresa CADE optase en el 2006, tres años después de su fundación, a montar su oficina en el Parque Científico, en donde continúa en la actualidad. Se dedican a la ingeniería y sus clientes están en su mayoría tanto en las zonas más industrializadas de España como en el extranjero.  

«Nosotros trabajamos con los propietarios de las plantas industriales de refinería o de energía termosolar, con las grandes ingenieras de proyección mundial que las están construyendo o  directamente con los que fabrican sus componentes. CADE hace desde los diseños de las plantas o de los equipos que allí se van a instalar hasta mejoras de lo existente para que sean más fiables o tengan un mayor rendimiento, pasando por otros servicios muy especializados  que nos son demandados».

A diferencia de lo que ha pasado con otros sectores y otras empresas, la crisis económica ha pasado de largo para esta empresa albacetense, pues no sólo, comenta  Berenguel, «la plantilla ha ido creciendo todos los años sino también la facturación y de hecho ahora somos 23 trabajadores y nuestra facturación ha crecido un 20% sobre el 2013 en el exterior y sorprendentemente también en el mercado interior».

En el extranjero, sus clientes están sobre todo en Europa, en Francia, Italia, Bélgica o Holanda,  aunque también los tienen en Oriente Medio. Ya en lo que es España, fundamentalmente se les requiere  en Madrid, en el norte peninsular y en diferentes polos industriales catalanes, por mencionar algunos. Lo que les hace más atractivos de cara a su contratación es que, dice Berenguel,  «nos hemos hecho especialistas en lo que hacemos, además de  que prestamos un servicio tecnológico muy cualificado e innovador». La última incorporación laboral que se han hecho es la de un ingeniero albacetense que ha estado trabajando en una plataforma petrolífera en Noruega, al margen de que el pasado año comenzó su expansión internacional abriendo con otros socios su primera oficina en el extranjero, en concreto, en Lima.

La mayoría de sus trabajadores son albacetenses y además formados en la UCLM, lo mismo que la mayor parte de los socios. Pero su vinculación con la universidad no se quedó en su formación sino que continúa, sobre todo, con la Politécnica. Organizan sesiones de motivación, prácticas y proyectos con los estudiantes. «Un ingeniero español tiene trabajo aquí y fuera y nosotros somos todo un ejemplo de ello».