El Conservatorio Profesional de Danza José Antonio Ruiz de Albacete desarrolla unas intensas Jornadas Artísticas, que en su segunda edición cuentan con dos invitados de excepción, Raquel Alarcón, en Escuela Bolera, y Pablo Savoye, Danza Clásica.

El equipo del centro y profesorado invitado trabaja intensamente para enriquecer la programación y ofrecer otras posibilidades para el futuro del alumnado, cada vez más numeroso e interesado en estas propuestas que aportan otros puntos de vista relevantes para su formación profesional.

El jefe de Estudios, Francisco Carbajal confirmó que «este año hemos añadido más talleres y tenemos una jornada completa desde las 16 horas, los tres días con una media de tres talleres distintos, maquillaje, inteligencia emocional, danza clásica, española e interpretación, todos con una gran acogida, porque es una forma de completar su formación».

La directora, Rosario Carbajal, destacó que «además se invitó a profesores oyentes de toda la comunidad autónoma».

Recordó Cristóbal Muñoz, jefe de Departamento, que «cada año tenemos más alumnado y las aulas van quedando pequeñas, lo que sí está claro es que estamos teniendo muy buena acogida, porque hay cosas muy novedosas».

También hoy tendrán un invitado que hablará sobre prevención  y tratamiento de lesiones.

Cada vez se conoce más el gran trabajo que desarrolla el Conservatorio José Antonio Ruiz, aunque  «todavía somos un poco desconocidos y con esto queremos mostrar que somos un centro vivo, que no paramos para que el alumnado tenga la mejor formación», decía  Cristóbal Muñoz.  

Aún la danza es una gran desconocida y todavía es complicado para el alumnado hacer posible su formación en el Conservatorio con los demás estudios, hacen falta más facilidades  para esta enseñanzas profesionales.

Grandes invitados. Pablo Savoye y Raquel Alarcón, profesores invitados, trabajan intensamente con sus grupos.

La profesora y bailarina, especializada en Escuela Bolera, comentó a La Tribuna de Albacete que «para mí estas jornadas son una buena oportunidad para saber qué está pasando con la Danza Española y estoy muy contentas porque tienen muchas ganas de aprender; están con los ojos y oídos abiertos para coger todo lo que pueden». La Escuela Bolera, decía, «requiere una buena preparación técnica, con unos acentos y musicalidad propias, es una de las pares más complicadas de la danza pero a su vez es muy bonita y ellos tienen un gran interés, se está haciendo un buen trabajo».

 Pablo Savoye, gran maestro de danza clásica, que ya conocía el trabajo del Conservatorio, «que quiere avanzar, mejorar e incorporar nuevas ideas y su evolución está muy bien, incluso algunas alumnas han venido a cursos de nuestra Escuela en Madrid y ya empiezo a conocerlas. Obviamente, el trabajo con ballet clásico es muy complicado, porque el trabajo es de muy largo plazo, siete u ocho años, y es muy difícil. Aquí estoy viendo un equipo de profesores muy interesado e incorporamos métodos modernos».