Rajoy presume ante Merkel del éxito de sus ajustes económicos

Agencias
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El 'popular' se congratula de encabezar «el mayor proyecto reformista de la Historia reciente» de España y conseguir que el país sea ya líder de Europa en crecimiento y creación de empleo

 
 
Éste será un año intenso para Mariano Rajoy, con unas elecciones generales a la vuelta de la esquina. Por ello, y tras iniciar el pasado domingo el curso político con su tradicional discurso en el Castillo de Soutomaior (Pontevedra), donde reivindicó su trabajo a lo largo de la legislatura que está a punto de terminar, el presidente del Gobierno puso ayer rumbo a Alemania para reunirse con la canciller germana, Angela Merkel, ante la que presentó sus logros de los cuatro años de mandato popular.
Merkel recibió a Rajoy en una cumbre informal en el palacio de Meseberg, en la que los dos mandatarios hablaron sobre la situación en la Unión Europea y la grave crisis migratoria a la que se enfrenta el Viejo Continente, así como de economía y de la situación en Grecia, entre otros asuntos. Según apuntaron fuentes del Ejecutivo alemán, se tratarían «temas esenciales», como los ya mencionados, así como «la situación de Ucrania, el acuerdo de Minsk, Libia y Siria».
Tras la firma en el libro de honor, sendos líderes conservadores cambiaron su vestuario por un atuendo más informal, con zapatillas de deporte, para dar un paseo por el idílico paraje de la casa de huéspedes del Gobierno de Berlín, en el estado federado de Brandeburgo, situado a unos 70 kilómetros de la capital germana. Allí se rememoró la visita que el año pasado hizo la canciller al presidente español, durante la cual, ambos recorrieron un tramo del Camino de Santiago.
Una vez concluida la caminata, los dirigentes cenaron y hoy mantendrán un desayuno de trabajo, para, por último, participar en la jornada de empresarios hispano-germanos en la sede de la Asociación de la Industria Alemania en Berlín, en la que también participarán el ministro de Finanzas local, Wolfgang Schäuble, y el titular de Economía español, Luis de Guindos, que discutirán sobre «una mayor integración de la zona euro».
Antes de presentarse a la cita, el presidente del Gobierno escribió un artículo en el diario económico alemán Hadelsblatt, en el que publicó lo que podría denominarse como prólogo de la reunión con Merkel.
En el texto, el popular presumió de haber liderado «el mayor proyecto reformista de la Historia reciente» de España y, gracias a ello, de haber conseguido que la nación «haya pasado de ser el enfermo de Europa a la vanguardia de la recuperación económica» del Viejo Continente en los últimos cuatro años en los que él ha estado al frente del Gabinete.
El documento, titulado La aportación de España a Europa, sirve para que el jefe del Ejecutivo patrio rememore que el país ha pasado por «la peor crisis que hemos conocido» y que, cuando llegó al poder, en diciembre de 2011, la situación era muy mala. Desde entonces, y gracias a las medidas aplicadas por el PP, este año el Estado «será líder en Europa en crecimiento económico y creación de empleo», con más de un millón de nuevos puestos de trabajo entre 2014 y 2015 y un incremento del Producto Interior Bruto (PIB) del 3,3 por ciento para el presente ejercicio.
Además, el mandatario conservador se mostró orgulloso en el texto de que a los españoles se les conozca como «los alemanes del sur» gracias a las recetas emitidas por Merkel -«la estabilidad, el reformismo, el rigor, la responsabilidad y la austeridad»-, que él ha tomado como eje de su política y que, a su juicio, son «el único camino posible para la recuperación», ya que «el inmovilismo en materia de reformas» no solo perjudica al proyecto europeo, sino también «al bienestar de los ciudadanos».
Eso sí, aunque en el artículo reconoció que aún «queda un largo camino por recorrer», el dirigente se mostró optimista de cara al futuro y esgrimió como muestra de confianza el regreso de los inversores extranjeros a España, que abandonaron al país cuando atravesaba por su peor crisis de la Historia reciente y que han vuelto al mercado nacional al recuperar la confianza en las finanzas españolas gracias a los ajustes realizados.
Pero no solo de finanzas se pronunció Rajoy en su documento en el Hadelsblatt. También aprovechó el momento para tratar otro de los temas que más preocupan en la actualidad, no solo a España, sino también a Europa: la crisis migratoria que vive el Viejo Continente.
En este sentido, manifestó que la preocupante situación se ha convertido en «el mayor reto» que afronta la Unión Europea y señaló que el país ha asumido el coste de actuar como «garante de la frontera sur» del bloque comunitario, de modo que abogó por la cooperación con las naciones de origen y tránsito de los irregulares y los acuerdos de repatriación.
Por último, hizo un guiño a los turistas alemanes al asegurar que España es un Estado «seguro» que coopera contra el terrorismo y colabora en las misiones de estabilización en África.