Ariel Rot: «Al final, sólo quedan las buenas canciones»

V.M.
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El cantante, guitarrista y compositor argentino ofrece hoy un concierto en acústico en la sala Clandestino de la capital

Su nombre está unido a la evolución del rock & roll en español de las últimas cuatro décadas y a una de las bandas más populares del período de la movida, Tequila, que levantaba pasiones entre las teenagers y donde interpretaba la mayoría de los riffs de guitarra. Embarcado actualmente en una gira acústica, Ariel Rot, recala hoy en nuestra capital, a las 22 horas en la Sala Clandestino, para repasar algunos de sus temas más populares y canciones de su último disco: La huesuda.

En esta gira muestra su lado más íntimo y establece una conexión  especial son su público, ¿cómo transcurre este viaje?

Es una experiencia totalmente nueva para mí, porque salgo solo al escenario. Nos ha llevado trabajo construir una narrativa propia tocando diversos instrumentos (guitarras y teclados); hay una parte más íntima, otra de rock & roll y una tercera más bohemia, además al tocar en lugares pequeños, la gente suele estar muy conectada con todo lo que va ocurriendo durante el concierto.

Una experiencia totalmente destina al tour con Loquillo y Leiva, ¿qué tal resultó esa aventura?

Sí, es todo lo contrario, esa gira  se caracterizó por shows muy eléctricos y por la interpretación de canciones aptas para todos los públicos. En este caso, se trata de un show mucho más específico y se nota mucho cómo la gente recibe estas canciones digamos no tan masivas.

¿Es de los que piensa que en música la verdad está en lo más simple?

A mí me parece tan importante la música popular digamos más simple, como la más sofisticada. Me gusta combinar ambas cosas incluso el jazz o la música brasileira... música espontánea y fácil de escuchar, pero con una complejidad importante.

Respecto a los temas que repasará en este formato acústico, ¿va a centrarse sobre todo en su último álbum?

El concierto está integrado por buena parte de los temas grabados durante los últimos años en mi carrera en solitario, aunque siempre hay lugar para alguna canción de Los Rodríguez o de Tequila, pese a que éste último es un repertorio más complicado para tocar en solitario.

En La huesuda hay un predominio de baladas y medios tiempos, ¿viene a ser un refugio para la reflexión?

Sí, tiene mucho que ver con ello. Es un disco que grabé antes de la gira con Leiva y Loquillo y son temas que se adaptan bastante bien a este formato acústico, porque tienen una atmósfera similar, es música especialmente indicada para pensar, analizar o reflexionar.

Su nombre está ligado a bandas muy populares del rock & roll de la escena nacional, es el caso de Tequila, grupo vapuleado por la crítica, ¿no cree que el tiempo ha dado la razón a esa apuesta divertida y desenfada?

Bueno, era un tiempo no muy dado a músicas complejas, coincidió con el auge de la movida y Tequila se inspiraba en grupos donde había cierto virtuosismo instrumental, lejos de la corriente que despreciaba precisamente la destreza musical. Si escuchas atentamente los discos, el grupo sonaba muy bien algo que reconoció buena parte de la crítica especializada, dejando de lado ese terreno borreguil e ignorante de los que pensaban que si gustabas a las chicas hacías música mala o dejabas de ser auténtico. Al final sólo quedan las buenas canciones, tanto como las buenas intenciones, en este sentido Tequila sentía la música como una religión y nos juntábamos a tocar todos los días.

¿Era premeditado el guiño a los Stones?

Éramos fans de los Rolling Stones, esa era la música que habíamos escuchado, como la de los Faces o The Beatles, nuestras influencias estaban muy marcadas en esa época.

El cambio experimentado con Los Rodríguez fue notable y contribuyó a revitalizar un panorama bastante desolador para el rock tras la experimentación de los 80, ¿cómo recuerda esa etapa?

Los Rodríguez era una banda que bebía básicamente del rock, pero que estaba bastante abierta a otras muchas influencias y nos atrevíamos con otros géneros sin ningún tipo de complejos, haciéndolos un poco nuestros... creo que eso fue lo que más impactó entre el público.

¿Cuáles son las influencias musicales que más le han marcado recientemente?

Escucho mucha música antigua, mucho jazz, mucho blues, brasileira... la verdad es que no escucho mucho rock actual.

¿Y cómo guitarrista?

Hay muchos que me han influido, desde George Harrison a Ron Wood o Keith Richards, pero también Django Reinhardt, Chet Atkins o grandes del blues como Albert King o Muddy Waters.

¿Cuándo escucharemos un nuevo trabajo de Ariel Rot?

Estoy trabajando ya en material nuevo y cuando crea que reúne la calidad suficiente entraré en el estudio de grabación, aunque todavía no tengo pensado qué tipo de instrumentación, orientación o producción tendrán esas nuevas canciones.