Bajo el lema ‘Sumar para Crecer, Crecer para Ganar, Ganar para Gobernar’, Podemos e Izquierda Unida ya han oficializado su apuesta por concurrir unidos a las próximas elecciones autonómicas y locales, previstas para mayo. Una colación que está aún a medio hacer -no habrá nombres ni candidaturas hasta bien entrado 2019-, pero que ya tiene lo fundamental, que no es otra cosa que el compromiso de ambas fuerzas políticas por «multiplicar» y posicionarse como una opción de Gobierno en Castilla-La Mancha.

La foto de hoy es, por ello, más que una foto. Tras meses de negociación y con el recuerdo del acuerdo fallido de 2015 en la cabeza de todos, tanto Podemos como IU saben que es hora de mostrar a la ciudadanía la «unidad popular» de las fuerzas progresistas. Más aún en un momento en el que los «partidos reaccionarios», en alusión a la derecha política, están comenzando a fraccionarse a la vista de todos, con VOX como último ejemplo de esta ruptura en el bloque conservador.

No obstante, todavía queda trabajo por hacer. El principal es que tanto Podemos como IU culminen sus propios procesos de primarias, que prácticamente acaban de arrancar. El objetivo es «dejar el trabajo hecho antes de Navidad», al menos en el ámbito regional, y una vez elegidos los candidatos de cada partido, elaborar unas listas de consenso.

En este sentido, tanto Juan Ramón Crespo, de IU, como sus ahora ‘compañeros’ de Podemos, José García Molina y María Díaz, se muestran muy reticentes a hablar aún de nombres. A su juicio, es un tema que no toca ahora.

No obstante, consideran que «va a haber una alta coincidencia». Como apunta el líder de IU, «si somos capaces de ponernos de acuerdo en la elaboración de un programa, ¿nos vamos a pelear por un puesto en un Ayuntamiento?».

Aquí el secretario general de Podemos, José García Molina, ya lanza una mensaje a navegantes: no es tiempo de «enredarse» en guerras internas. En relación con IU, «es más lo que nos une, que lo que nos separa», y dentro de sus propias filas, advierte de la necesidad de «que las disputas internas no borren de mapa lo importante». Tras ‘Vistalegre II’ parece que Podemos tiene la lección de cómo hacer primarias -al menos la teoría- bien aprendida.

Además, todavía les queda gente por sumar a esta coalición, que, salvo cambios de última hora, concurrirá a las elecciones bajo la marca ‘Unidas’. Tanto Equo como el Partido Castellano están invitados a sumarse, y, también todos aquellos agentes políticos, sociales y sindicales «implicados en un proyecto con el que cambiar la realidad», aseguran.

En cuanto a sus perspectivas electorales, a día de hoy la ‘fuerza’ de esta coalición son los dos diputados regionales ‘morados’ presentes en las Cortes regionales por Toledo y Guadalajara y el aproximadamente cinco por ciento de votos que IU tiene en el ámbito autonómico, aunque lleva cerca de 20 años fuera del Parlamento Autonómico. Por contra, IU tiene una fuerte implantación muncipal, de la que Podemos, al menos de momento, carece.

Insisten en que su objetivo es ganar las elecciones y formar «un gobierno serio y trabajador», sin ser «la apostilla de nadie». «Hemos llegado para gobernar, no para prestar a apoyo a nadie, para ese viaje no hacen falta apoyos», recalca Crespo, en clara alusión al pacto de Podemos con el PSOE y que ha llevado a la formación morada a entrar en el Gobierno regional hace poco más de un año. Un pacto que en su día fue criticado por IU, aunque en los últimos meses su dirección regional ha matizado este discurso.

Con todo, el actual panorama político invita a pensar que las elecciones de mayo traerán consigo un importante movimientos de pactos, tanto en el ámbito autonómico como en el municipal. Como avisa García Molina, el tiempo de las mayorías absolutas ha terminado.

En este sentido, Crespo descarta cualquier acuerdo con Ciudadanos y el PP. En cuanto a los de García-Page, el líder de Podemos afirma que «me encantaría que si no logramos la mayoría absoluta el PSOE nos prestara diputados para poder acometer la investidura.