Un Mundial de oro puro

E.R.J.
-

El tirón del Campeonato de fútbol se traduce en ventas de material de 'La Roja' y en consumiciones duplicadas en Hostelería, bueno para la distribución

El oro de Moscú vuelve a tener su relevancia. En esta ocasión, no sólo la capital, sino todo el país caucásico, son clave. En su condición de escenario, bien es cierto, pero no por ello se puede desdeñar.

Durante un mes, el mundo entero tiene puestos sus ojos, a través de los televisores, las pantallas gigantes, los ordenadores o los móviles ‘inteligentes’, en este país que concentra las selecciones participantes en el Mundial de Fútbol.

Un periodo al que, inevitablemente, se le tratará de sacar el máximo provecho, no solo en lo deportivo, sino casi más, en lo económico. Las grandes marcas publicitarias hacen su agosto y los jugadores se convierten en actores provisionales de maquinillas de afeitar, champús, trajes de chaqueta o coches que están al alcance de pocos.