Ante la grave situación de sequía en la que se encuentran las plantaciones de secano en la localidad y otros municipios de la comarca, que alcanza a unas 32.500 Hectáreas de leñoso y el 100% del cereal, la Plataforma de regantes y usuarios de la cabecera del Segura, vuelve a solicitar a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), tras la petición no atendida de mayo, «la autorización coyuntural de riegos de socorro».

El presidente de la Plataforma, Guillermo Sánchez, recuerda en una carta enviada ayer a la Confederación Hidrográfica del Segura que, a mediados de mayo, ya se solicitó la autorización coyuntural, y no han obtenido respuesta y que la situación es muy grave, hasta el punto «de que si no se autorizan esos riegos de carácter temporal, los agricultores vamos a sufrir grandes pérdidas en las plantaciones e, incluso, pérdidas patrimoniales porque la mayoría de los árboles se van a secar».

En el escrito dirigido al presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura, se vuelve a solicitar (como ya se hizo a mediados de mayo), «autorización coyuntural, en precario y de carácter temporal, de riegos de socorro de las plantaciones que se indican, con referencias catastrales, mediante los llamados pozos de sequía, o las captaciones que disponen las Comunidades de Regantes integradas en la Plataforma, para evitar la pérdida de las plantaciones y el correspondiente daño medioambiental, en base a lo dispuesto por el Reglamento de Dominio Público Hidráulico».

En la solicitud, que tuvo entrada en la CHS el 19 de mayo, según explica Guillermo Sánchez, se recuerda que «como es de sobra conocido, el sudeste de la provincia viene padeciendo una extrema sequía en los últimos meses, más acusada todavía en abril y mayo, donde las precipitaciones han sido nulas. Esta situación, junto a la escasez de reservas en el suelo y las altas temperaturas, que anormalmente se vienen produciendo, está provocando esta grave sequía que amenaza no ya sólo a la cosecha de este año, sino a las propias plantaciones de leñosos (vid, almendro y olivos), que podrían perderse definitivamente».

La falta de respuesta de la CHS, agrava la situación, hasta el extremo de que algunas plantaciones estarían a punto de perderse definitivamente, generando un gran perjuicio económico a los agricultores de esta comarca.

gran perjuicio. En la petición de mayo, reiterada en la mañana de ayer a la Presidencia de la Confederación del Segura, ya se decía que, además «ocasionará un grave problema medioambiental de no adoptarse medidas urgentes, que permitan dar riegos de auxilio o de socorro que permitan salvar estas plantaciones».

No entienden los regantes la falta de respuesta de la CHS, cuando «dispone de una serie de pozos o baterías de sondeos en la comarca, esos llamados ‘pozos de sequía’, que se construyeron tiempo atrás, con la finalidad de atender necesidades extremas, como las que están sucediendo en estos momentos».

Y es que el artículo cinco del RD-Ley 14/2009, por el que se adoptan medidas urgentes para paliar los efectos producidos por la sequía en determinadas cuencas hidrográficas, faculta a los presidentes de las confederaciones hidrográficas para «autorizar la puesta en marcha, por cuenta propia o ajena, de cualquier sondeo, cuente este con instalación elevadora o no, que permita la aportación provisional de nuevos recursos». Facultad que incluye «la puesta en servicio de sondeos existentes o la ejecución de otros nuevos».