La coincidencia del arranque de la campaña «oficial» de rebajas con un festivo, domingo después de Reyes, propició una mayor afluencia de clientes en los establecimientos en particular durante la mañana, y en especial de ciudadanos procedentes de las zonas de influencia de la capital, es decir, de los municipios de la provincia. Muchos fueron también los que aprovecharon la jornada comercial para cambiar los regalos con los que los Reyes Magos no han acertado.Si bien desde que se estableciera la liberalización comercial, cada establecimiento puede fijar el inicio del período de rebajas cuando quiera, adelantándolo o retrasándolo en función de sus intereses, es a partir del día 7 de enero cuando un mayor número de comercios se suman a la campaña con descuentos atrayentes para que los consumidores gasten el máximo dinero posible y los comerciantes puedan obtener los máximos beneficios.