El Mercado de Villacerrada mantendrá su horario actual y sólo abrirá la tarde de los viernes, tal y como hasta ahora. La concejal de Mercados y Abastos, Rosa González de la Aleja, confirmó a La Tribuna que esta era la decisión a la vista del sentir mayoritario de los comerciantes, pues sólo «dos o tres» titulares de puestos habían respaldado la solicitud de apertura en horario vespertino.

La edil explicó que aunque este edificio es de propiedad municipal, son los comerciantes quienes lo «disfrutan» y por tanto, su opinión pesa mucho ante cualquier decisión. Así la cosas, y la vista del acta de la reunión que celebraron los comerciantes en diciembre y en la que manifestaron de forma mayoritaria que no querían abrir las tardes de lunes a jueves, el Ayuntamiento de Albacete ha decidido mantener el horario actual. «Si se abre el mercado es porque todos los puestos lo van a hacer, que sólo abran algunos puede acarrear problemas de limpieza o de daños» argumentó González de la Aleja.

Los tenderos de Villacerrada levantan sus persianas cada día entre las 7.30 y las 8 de la mañana y cierran a las 2.30 del mediodía. La tarde de los viernes, uno de los días de más venta, sí que abren entre las 17.30 y las 20.30 horas. Este es el horario que se mantendrá.

Mejora de la limpieza. El comité de comerciantes de Villacerrada, se reunió con la concejal de Mercados hace unos días para tratar éste y otros asuntos. En el encuentro, hablaron de la revisión de cámaras de seguridad y de mejorar la limpieza del punto de información del Mercado.

Precisamente, la mejora de la limpieza de las instalaciones es uno de los aspectos que preocupa a los comerciantes. Ahora son los operarios de limpieza viaria los que se encargan también de adecentar el mercado. A la vuelta de un par de meses, habrá un servicio específico dedicado exclusivamente a limpiar los dos mercados municipales y la lonja. Según les explicó la concejal de Mercados, el propósito de este cambio en el servicio es doble, por un lado mejorar la protección de los derechos laborales de los trabajadores y por otro conseguir una mayor especialización de los operarios encargados de estas instalaciones.

En el encuentro, la representación de los comerciantes y la concejal de Abastos tuvieron la oportunidad de hablar sobre la conveniencia de ocupar los locales vacíos que en estos momentos hay en Villacerrada. Son 19 los puestos de venta que ahora mismo están libres, entre otros está sin ocupar la superficie que hace unos años albergó un supermercado en la plan baja. Hace año y medio, con el ánimo de encontrar tenderos dispuestos a montar negocios en estos lugares y convocó una subasta para adjudicarlos al mejor postor. Sólo un nuevo negocio se abrió en el mercado, Pan y Dulces La Laboriosa.

La concejal de Mercados animó a todo aquel que esté pensando en abrir un negocio es valorar la idea de establecerse en Villacerrada. Recordó que el mercado no sólo está abierto a puestos de alimentación, sino que caben otras muchas actividades. En la planta baja, donde hay más de 10 puestos libres, se pueden vender frutas, hortalizas y patatas, pan, salazones, conservas, especias y caracoles, pero también se permiten puestos de droguería, arreglos de ropa o calzado y, en general, cualquier actividad que no sea la venta de carne, pescado y quesos, pues estos tres tipos de alimentos están reservados para la planta primera del mercado. En el primer piso, hay libres cuatro puestos de pescadería y otros cinco de carnicería, charcutería o venta de quesos. En la planta baja, como decimos, está sin adjudicar un local de 300 metros que en su día funcionó como supermercado.

En Villacerrada se paga una renta de alquiler de 9,20 euros por metro cuadrado, aunque previamente hay que pagar el canon de adjudicación establecido en 951,41 euros por metro. Ante la sugerencia hecha por algún tendero de suprimir ese canon para facilitar la instalación de nuevos negocios, que no era posible dado que ese el coste mínimo de mantener el mercado.

Mientras se ocupan estos espacios, una de las opciones que se ha barajado para mejorar la estética del mercado es invitar a grafiteros a decorar las persianas, aunque esta medida está por concretar.