Las abundantes lluvias producidas a principio de esta semana causaron que la Vega de Belén, principal afluente del embalse almanseño, y procedente de los términos municipales de Montealegre y Alpera, aportarse al Pantano de Almansa una enorme cantidad de agua que propició que la instalación hidráulica pasase en horas, de poco más de los 18 metros y medio de seguridad, a superar los 19,40 m.