La pasada semana publicábamos en este diario el relato de los incidentes acontecidos en el partido de la liga Juvenil Provincial entre la UDAlpera y el Fundación Albacete que se disputó el pasado 14 de octubre en el Municipal Jesús Colomer de Alpera y que terminó con una tangana en la que hubo algunos heridos, entre ellos jugadores de ambos equipos y el presidente del equipo local.

Este diario consultó con todas las partes implicadas en el incidente ofreciendo la declaración del concejal de Deportes de Alpera, Tomás Delicado, que indicó que el entrenador del Fundación, David Paños había sido el incitador de la tangana, también consultó el acta arbitral y con la Guardia Civil que tuvo que intervenir. Además, consultó al Albacete Balompié, cuyo vicepresidente Víctor Varela indicó que recabaría información y tomaría las medidas oportunas.

Una semana después, un grupo de padres de jugadores del Fundación se dirigió a este diario para ofrecer su versión de los hechos y que dista mucho de la de la otra parte implicada. Así, en representación de los padres visitaron esta redacción Jesús Escribano, José Luis Calero, Eloy García, María Isabel García, Nieves Correoso y Emiliano Martínez, que en primer lugar quisieron aclarar que «estamos en contra de la violencia y en los partidos de nuestros hijos nunca había habido ningún incidente, ni hemos tenido ningún problema con otras aficiones».

Después denuncian que ocurrieron «cosas anómalas» dentro de un recinto deportivo, como «el consumo de alcohol» en el bar del campo, algo que está prohibido.

Destacan que «el partido se desarrolló con total normalidad, no hubo nada entre los chavales, se llegó al final del partido con la tensión propia del resultado, pero no pasó nada. No tuvimos ningún problema con los padres de los jugadores del Alpera».

Hubo un jugador del Fundación que al final del partido «comete el error de saltar al campo a pedir explicaciones al árbitro y a partir de ahí se lía porque saltan al campo cuatro o cinco adultos, que no estaban en la grada con los padres del Alpera, sino que estaban en la cantina tomando unas consumiciones alcohólicas, llegan a la altura del jugador y se ponen a empujarlo y eso fue como echar gasolina al fuego», explican los padres. Eso conllevó, según los padres del Fundación que se formara la tangana con los jugadores de ambos equipos.

En este punto, destacan que «un señor con un polo rosa, que después la Guardia Civil  lo identificó como el presidente del Alpera, entró pegando puñetazos a los jugadores y nosotros entramos al campo para llevarnos a nuestros hijos y llevarlos al vestuario».

Según esta versión, fueron ellos quienes llamaron al 112 para avisar a la Guarda Civil. En este sentido, recuerdan que «con los jugadores en el vestuario nos tuvimos que quedar en la puerta porque había gente exaltada que querían entrar al vestuario porque querían agredir a David Paños».

Defensa del técnico.

Sobre el papel de Paños, los padres dejan claro que «salió a frenar al jugador y es cierto que le dijo al árbitro que la culpa era suya, pero nada más. Ni el entrenador, ni el jugador querían agredir al árbitro y si no llega a ser por que los cuatro que estaban en el bar bebiendo entran al campo allí no pasa nada» y creen que «todo viene motivado por el alcohol».

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