El Pleno extraordinario de la Diputación celebrado ayer aprobó, por unanimidad, dos convenios que suman, entre ambos, tres millones de euros y que servirán para ejecutar diversas inversiones en Albacete y de Hellín.
Pese a la unanimidad, ambos puntos siguieron guiones diametralmente opuestos. En el caso del punto que correspondía a Albacete -un convenio de un millón de euros con su Ayuntamiento para financiar «inversiones sostenibles» en la capital de la provincia- el debate fue inexistente y la votación fue tan rápida que más pareció una dación de cuentas.
Pero, en el punto que afectaba a Hellín, su alcalde, Manuel Mínguez, y el diputado socialista, Ramón García, se enzarzaron en un intenso debate, en el que el centro de la polémica no era el ‘qué’ -la reforma del Centro de Salud número Uno de la localidad- sino el ‘cómo’ -esto es, la forma elegida para financiar las obras.
El problema residía en el mecanismo elegido, un convenio entre la Diputación y el Sescam, por dos millones de euros, para reformar el Centro de Salud hellinero, que ha funcionado en unos barracones «provisionales» desde el año 2009. La Diputación pondrá, según los términos del acuerdo, 600.000 euros, mientras que el Sescam pondrá 1,4 millones de euros.
Esa fórmula de financiación fue lo que motivó el ‘pero’ socialista. «Se están saltando a la torera sus propias leyes, esto es, la Ley 27/2013, de reforma local, que pretendía poner coto a las ‘competencias impropias’, esto es, evitar que las Corporaciones locales se endeuden asumiendo costes que no son suyos pues, en este caso, de la Junta, que es quien tiene el 100% de las competencias en Sanidad», afirmó García, quien también es concejal en Hellín.
Por su parte, desde las filas del PP, Manuel Mínguez se aferró a un argumento sencillo: «lo que les interesa a los 18.000 vecinos que hacen uso de este centro es que se arregle y abandonen los barracones en los que llevan cinco años -sentenció- no de qué forma se consiga».
Fijadas las posiciones, ambas partes protagonizaron un intenso debate, en cual el PSOEreprochó al PP que, una vez más «salen al rescate de la Junta» para que «a Cospedal le cuadren las cuentas», y el PP hizo lo propio, al reprochar al PSOEque no haría falta recurrir a convenios como éste «si no hubiesen dejado 43 millones de deuda» en el Consistorio hellinero.
Tras tres turnos de intervención, más alguna intervención «por alusiones», el vicepresidente, Constantino Berruga, quien ocupaba la presidencia del Pleno de ayer, dio paso a la votación en la que, pese a todo lo antedicho, fue unánime, y a favor, de la firma y ejecución del convenio.
Las obras deberán terminar antes del 31 de diciembre de 2015.