El conflicto por el legado de Purificación Urrea se extiende en el tiempo y sigue enredado en los tribunales. Ayer, el Juzgado de Instrucción Número 3 de Albacete citó a declarar al popular Francisco Núñez, como expresidente de la Diputación Provincial, y al actual dirigente de esta institución, el socialista Santiago Cabañero.El motivo, la querella que han interpuesto seis de los herederos de Purificación Urrea -que falleció hace ya 52 años- contra el alquiler de las fincas de explotación agraria que eran propiedad de Urrea, que dejó a la Diputación y que se arrendaron cuando Núñez era presidente, siguiendo en la actualidad la concesión que se firmó. Tras algo más de dos horas, y habiendo declarado primero Núñez y después Cabañero, el abogado de ambos, José Manuel Minaya, explicó que, aunque ambos están siendo investigados por las formalidades del proceso, habían defendido ante la jueza que «son dos personas absolutamente ajenas a la querella que se ha planteado».