El 10% de las masas de agua superficiales naturales del río Tajo están en mal estado. En concreto, un 5% tienen un estado deficiente y otro 5% un estado malo. Así se refleja en el borrador del Plan Hidrológico del Tajo, que recoge pormenorizadamente el estado de las aguas que discurren por todo el caudal del Tajo, tanto superficiales como subterráneas.

En la cuenca del Tajo, según contempla el borrador, se declaran 324 masas de agua superficiales, de las cuales 198 son naturales (191 ríos y 7 lagos) y 126 son artificiales o muy modificadas (59 ríos, de los que es uno es artificial, y 67 embalses).

Ese 10% en mal estado corresponde a masas de agua superficiales naturales de ríos, ya que las de los lagos se encuentran en buen estado en un 86% de los casos, mientras que las de los ríos en buen estado representan un 55%. Del resto, sólo el 5% de las masas de agua ha sido calificado en muy buen estado, un 23% moderado (más cercano a bueno) y de un 6% su estado está sin evaluar.

Asimismo, en el caso de las aguas artificiales o muy modificadas, es el 30% de las masas el que se encuentra en un estado deficiente y malo (en mayor medida deficiente), mientras ese estado es bueno o superior en un 39%.

El borrador del plan también señala el estado químico de las masas de agua superficiales, que en este caso tiene buen estado en un 97% de las masas y sólo el 3% no alcanza el estado químico correcto.

En general, teniendo en cuenta tanto el estado ecológico como químico, el 52% de las aguas superficiales tiene un buen estado y el 42% registra un estado peor que bueno.

subterráneas. Por otro lado, para la elaboración de este plan hidrológico también se han analizado las aguas subterráneas del río Tajo, de manera que desde un punto de vista cuantitativo el estado es bueno al 100%, pero al igual que con las masas superficiales también se ha llevado un análisis de otros factores como el estado químico y el estado de la masa.

En el primer caso, sobre el estado químico, del borrador del Plan de cuenca del Tajo se desprende que el 75% de las aguas subterráneas tiene un buen estado y el 25% restante se encuentra en mal estado.

En cuanto al estado de la masa, registra los mismos porcentajes que el estado químico, es decir, el 75% bueno y el 25% malo. Con todo ello, podría decirse que las aguas subterráneas tienen un estado más uniforme y que, en general, es bueno.

Además, el borrador establece el estado por zonas, y en este sentido destacan por su mal estado tanto químico como de la masa partes de la cuenca del Tajo situadas en Guadalajara, La Alcarria, Talavera, Ocaña y dos zona de Madrid (Guadarrama-Manzanares y Aldea del Fresno-Guadarrama).