Casi un millar de personas en la provincia de Albacete han visto afectada su situación de forma repentina. Son aquellos que llevaban varios meses pagando a la Seguridad Social para poder jubilarse a los 61 años sin que su pensión se viera excesivamente afectada y ahora, con la modificación recientemente aplicada por la Seguridad Social, tendrán que esperar hasta los 63 para poder jubilarse con esas condiciones.

Este grupo de afectados se une a «los centenares de desempleados mayores de 55 años que, cuando fueron despedidos, se suscribieron a este mismo convenio especial de la Seguridad Social para poder engordar su pensión final», afirman desde CCOO en Albacete.

Uno de los criterios para acogerse al convenio especial era que no podían volver a trabajar el tiempo que lo pagaran. Sin embargo, ahora, «después de desembolsar una buena cantidad de dinero y cuando están sin empleo, la Administración cambia de criterio y les pide que aguanten en la misma situación dos años más».

DATOS A LA BAJA. El Ministerio de Empleo ha estimado que en esta situación se encuentran 35.000 afectados en toda España, , mientras que los cálculos realizados por CCOO a nivel Confederal sitúan esta cifra en más de 132.000.

En el caso de la provincia de Albacete, el sindicato considera que han sido abocados a esta inesperada situación cerca de un millar de albaceteños, si bien los datos facilitados a CCOOpor el Ministerio apuntan a alrededor de 250.

DERECHO LIMITADO. De esta forma, desde CCOO lamentan que la Administración de la Seguridad Social está aprobando nuevos criterios «que limitan el derecho a la jubilación de los trabajadores despedidos que incluía la reforma de pensiones de 2011».

Ya en 2013, el Ministerio de Empleo modificó, recuerda el sindicato, los criterios del convenio al diferenciar entre los motivos del despido. Así, permitía la jubilación a los 61 años si la persona estaba desempleada por despido colectivo, pero la ampliaba dos años más, hasta los 63, si el despido había sido individual, excepto si habían sido despedidos antes del 1 de abril de 2013.

La modificación de ahora, aprobada el pasado junio por la Seguridad Social, implica que todos los desempleados por despido individual, independientemente de cuándo les hayan rescindido el contrato, se jubilen a los 63 años.

SE EXTRALIMITA. CCOO entiende que la Seguridad Social «se extralimita en la capacidad de interpretación de la normativa» y por ello exige «que se vuelva a una interpretación literal de la misma».

Critica la organización que, un convenio especial de la Administración que trataba de dar seguridad al futuro de aquellas personas que se suscribían, «hoy es un grave perjuicio para los mayores de 61 años» porque «no pueden jubilarse y tienen que seguir pagando el convenio durante dos años más» y, además, «sin obtener ingresos», añade.

Para el sindicato, «lo más sorprendente es que no ha habido ningún cambio de leyes ni de normativa, sólo de criterio» y, ante ello, Comisiones Obreras aconseja a los afectados por este cambio de criterio «que soliciten en este momento su pensión de jubilación» y, para ello, matiza, «deben especificar en la solicitud su deseo de ejercer el derecho a que les sea aplicada la cláusula de salvaguarda de la Ley 27/2011».