Los años de la crisis derivaron, como una de las principales consecuencias, en el cierre del grifo de las entidades financieras a la concesión de préstamos. Las dificultades económicas de los ciudadanos, unidas a esta circunstancias, provocaron un desplome en las operaciones que requerían un mayor desembolso monetario, principalmente en la compra de una nueva vivienda.
Por eso, ahora, el repunte en la firma de nuevas hipotecas para adquirir un piso o una casa cobra más peso, porque no sólo implica que empiece a tener salida el stock inmobiliario -que en nuestra provincia está cifrado en unas 3.000 viviendas según la asociación de constructores y promotores- sino que, sobre todo, lo que refleja es un cambio, muy tímido de momento, en la economía albaceteña. Un aumento de la confianza y un repunte en el consumo que empieza a llegar también a las inmobiliarias y promotoras, aunque también a los bancos, que se quedaron con muchas propiedades y que las ofertan a un precio más bajo que quienes las construyen.
Con este panorama, se puede concluir que el mes de mayo ha sido mejor que el de hace un año para la firma de nuevas hipotecas sobre viviendas. Mientras que en este mes del 2014 se aprobaron 85 operaciones de este tipo, en 2015 se han sumado cuatro más, lo que ha permitido constatar un aumento interanual del 4,7%
Aún así, se ha experimentado en el último mes un retroceso notable, del 21,9%, en relación a abril, cuando los préstamos formalizados por este motivo fueron 114.
MÁS DINERO. Lo que va a más, mes a mes, y es probablemente más a tener en cuenta, es el importe medio por el que se firmaron los préstamos hipotecarios para adquirir un piso o una casa. Los beneficiarios de estas operaciones en el mes de mayo consiguieron de las entidades financieras casi 80.000 euros de media (79.224 euros), cuando el mes anterior la cuantía media se quedó en unos 10.000 euros menos por hipoteca concedida (69.280 euros). Superó, además, el importe medio de los préstamos sobre vivienda que se firmaron en mayo de 2014 (77.388 euros).
En el quinto mes del año, según lo que se desprende también de la estadística que mensualmente publica el INE, en la provincia albaceteña se suscribieron, en total, 152 hipotecas, la mayor parte para la adquisición de fincas urbanas, aunque también fueron 30 las que se destinaron a finas rústicas. Sobre esa cifra total, el 58,5% se destinaron a la comercialización y adquisición de un inmueble residencial.