El italiano Alessandro de Marchi (Cannondale) se impuso ayer en la séptima etapa de la Vuelta, transcurrida entre Alhendín y Alcaudete sobre 169 kilómetros, al entrar en solitario como único superviviente de la fuga del día y tras una etapa dura por los repechos que, no obstante, no comportó cambios en una general que sigue liderando Alejandro Valverde (Movistar).
El ganador aprovechó la subida constante de los últimos kilómetros, siempre picando hacia arriba pese a no ser considerado un final en alto, para cambiar el ritmo y dejar atrás a Johann Tschopp (IAM), su pareja de baile. Ambos descolgaron del cuarteto de escapados al francés Hubert Dupont (AG2R) y al gran favorito, Ryder Hesjedal (Garmin), que se cayó y perdió cualquier opción.
Tanto De Marchi como Tschopp intentaron o hicieron el amago de esperar en un gesto deportivo a Hesjedal cuando el canadiense se fue al suelo, pero al ver que no llegaba decidieron tirar hacia adelante.
En el grupo de los favoritos, pese a no jugarse nada al no haber bonificaciones en juego, hubo un acelerón por parte de Philippe Gilbert (BMC) y Daniel Martin (Garmin), y un pequeño corte en el que se metió Chris Froome (Sky), que pudo sacarle otro pellizco al resto de los favoritos en forma de tres segundos.
La mala noticia fue para el francés Warren Barguil (Giant), que se cayó a unos metros de la meta, aunque no perderá tiempo al estar dentro de la zona de protección. El noveno clasificado de la general entró a pie, dolorido, al irse al suelo en la última curva antes de cruzar la línea de meta situada en Alcaudete.
También besó el suelo el británico Chris Froome. El ganador del Tour 2013 no pagó las consecuencias de la caída, eso sí, tiene el lado derecho magullado y tuvo que ser atendido por los médicos.
Su equipo le arropó y, pese a que al principio perdió algo de tiempo con respecto al grupo de Valverde y Contador, pudo enlazar con ellos gracias al trabajo de sus compañeros una vez superado el Alto de Íllora.
Tras el primer paso por Alcaudete se subió el Alto Ahillo, de segunda categoría, donde el británico ya no tuvo ningún tipo de problemas. A partir de aquí, el pelotón marchó agrupado tirado por Trek y Lampre, que dieron caza a algunos hombres de la escapada. Mientras tanto, el Tinkoff de Contador se mostró tranquilo a diferencia de la primera subida, donde se puso en cabeza coincidiendo con la caída de Froome.
De cara a hoy, los corredores partirán de Baeza para llegar, después de 207 kilómetros, a Albacete, en una de las etapas más largas. Será una jornada de transición, llana, en que el pelotón intentará evitar las fugas en busca de un sprint en un de las últimas opciones claras de llegada para los velocistas.
Merckx, ingresado. Por otro lado, el belga Eddy Merckx está hospitalizado a las afueras de Bruselas tras someterse el pasado jueves a una operación de corazón debido a una arritmia, según informó el diario Le Soir.