La puerta del Teatro Circo acogió, una Feria más, el concierto promovido por la Asociación Nacional de Amigos de los Teatros Históricos de España para festejar la recuperación de este emblemático coliseo de la cultura, un evento que sirvió también para conmemorar los 20 años de andadura de Amithe y para hacer entrega de la medalla de oro de la Asociación al periodista albacetense Emilio Martínez, colaborador de La Tribuna de Albacete.
A la cita asistieron la alcaldesa de Albacete, Carmen Bayod, el director del Museo Nacional del Teatro, Andrés Peláez, los actores Manuel Galiana y Tony Isbert, la gerente de Cultural Albacete, Sonia de la Banda y el presidente de Amithe, Javier López-Galiacho, entre otra personalidades.
El máximo responsable de Amithe agradecía el apoyo del Ayuntamiento en este concierto popular y confesaba que «el mejor logro de todos estos años es haber conseguido levantar de nuevo el telón del Teatro Circo, aunque ahora debemos seguir luchando por preservar este patrimonio teatral». López-Galiacho también mostró su reconocimiento a «las personas que desde su trabajo y amor a Albacete luchan por conseguir los fines de Amithe, como es el caso de Emilio Martínez, verdadero embajador de Albacete en Madrid».
Visiblemente emocionado el periodista, miembro de la Asociación de la Prensa de Madrid y de la Asociación Española de Periodistas Deportivos, editor, redactor-jefe y jefe de Cultura y Deportes de Diariocrítico y de la televisión Mdctv.es, resaltó la labor realizada por Amithe y, en concreto, de toda la familia López-Galiacho, proponiendo al Ayuntamiento que una calle de la ciudad pudiera llevar su nombre. Haciendo gala de un sincero albaceteñismo -con algún pijo incluido- agradeció a Amithe «haber contribuido a la recuperación de una de las cosas más importantes que tiene Albacete: el Teatro Circo, único en el mundo».
«NO CAER EN LA DESIDIA». En ese mismo sentido, el presidente de honor de la asociación aseguraba que este coliseo «es un orgullo para toda España». Galiana instó a las instituciones a «no caer en la desidia» y a seguir trabajando para hacer de Castilla-La Mancha un lugar de referencia en materia cultural.
Por su parte, Carmen Bayod elogió el trabajo de Amithe en pos de conservar el rico patrimonio teatral español y destacaba el hecho de haber elegido el Teatro Circo como marco para entregar los prestigiosos premios nacionales que ha instituido. Finalmente, la regidora dio paso al concierto de la Banda Sinfónica Municipal, agrupación de la que dijo sentirse especialmente orgullosa por los niveles de calidad alcanzados, que interpretó composiciones de Penella, Giménez, Sorozábal, Guerrero y Benlloch y M. San Miguel, entre ellas la popular romanza No puede ser de la zarzuela La tabernera del puerto, que cantó el tenor madrileño Miguel Ferrer.