El PP trabaja para que el voto de la derecha no se fragmente

S.L.H
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Este ha sido el mensaje que ha lanzado la secretaria regional del partido, Carolina Agudo, tras la celebración de la Convención nacional del PP, en la que el líder 'popular' Pablo Casado ha reclamado el espacio perdido en los últimos años.

Carolina Agudo, secretaria general del PP de Castilla-La Mancha.

En rueda de prensa, Agudo ha defendido que el Partido Popular es el "único" capaz de devolver los mejores tiempos a España y a Castilla-La Mancha, dejando claro que los votos que no vayan a parar al PP serán votos perdidos. "Queremos decirle a los castellano-manchegos y españoles que si quieren que gobierne el Partido Popular deberán votar al PP", apostilló la número dos de la formación en la región, una tesis que, sin embargo, no se sustenta si se mira hacia Andalucía donde el PP gobierna gracias a los votos de Cs y VOX.

Asimismo, Agudo lanzó dardos contra la izquierda "trasnochada" y "rancia" que gobierna tanto en la comunidad autónoma y en España y que, a su juicio, "resta libertades". "Cuánta menos izquierda trasnochada y rancia haya, más libertades habrá", sostuvo la secretara regional del PP, que defendió el decálogo de medidas que Casado hizo público en la Convención nacional de este pasado fin de semana.

Entre las medidas, enumeró Agudo, está la puesta en marcha del artículo 155 de la Constitución española nada más Casado llegue a la Moncloa, así como la reforma de la ley que impediría el indulto a aquellos acusados por rebelión o sedición. El PP también propone rebajar algunos impuestos y eliminar otros como el de Sucesiones y Donaciones o Patrimonio, una ley nacional de educación que "dé libertad educativa a los padres, también para la educación concertada" y el impulso a la natalidad y la conciliación entre la vida laboral y personal.

Reformar la administración pública para hacerla "más ágil, eficiente y eficaz" también entra en los deberes del PP si alcanzan de nuevo los gobiernos de la región y del país. Al respecto, Agudo detalló que se trata de eliminar altos cargos y asesores, así como organismos duplicados con la Administración estatal. "Eliminar lo superfluo", zanjó. Esto mismo lo llevó a cabo María Dolores Cospedal en el año 2011 en Castilla-La Mancha. "Después de casi cuatro años de gobierno de García-Page, donde se han perdido muchos derechos y libertades, los ciudadanos nos están pidiendo en la calle que volvamos a dirigir Castilla-La Mancha", subrayó la número dos del PP autonómico.