García asume el reto de conectar al 100% de la población

C.M
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La consejera de Fomento destacó la necesidad de «ofrecer a las empresas las herramientas para ser competitivos» y de impulsar la tecnología en zonas rurales para frenar el proceso de pérdida de habitantes en pequeños pueblos

Agustina García Élez contempló el reto de la transformación digital ofertando un panorama regional protagonizado por una dispersión territorial en la que la llegada de las nuevas tecnologías pueden suponer importante índices de desarrollo. En este sentido, y apuntando que este puede ser un factor «más para garantizar la igualdad en todos los territorios dentro del reto de combatir la despoblación», la consejera de Fomento no pudo resistirse a evidenciar «la desventaja que ha supuesto» en los márgenes de competitividad de las empresas «lo poco avanzado en la anterior legislatura ‘popular’.

Sin embargo, y tornando el problema como «un revulsivo y una oportunidad de llevar la igualdad al mundo rural», García Élez consideró que el «empeño y el objetivo básico» es el de «buscar el 100% de conectividad» continuando «la inversión y la investigación». Así, y denotando «el salto cualitativo y cuantitativo» llevado a cabo en esta legislatura, agradeció la colaboración de «operadores de telefonía y servicios comunicativos como Telefónica» en el acompañamiento a un Gobierno que al llegar se encontró con que «sólo 25 municipios tenían acceso al 4G» cuando hoy esta cifra está en los 1.133 municipios. Además, y ya que en 2015 «sólo cinco localidades regionales tenían fibra óptica cuando ahora llega a 183», la consejera destacó, sobre los polígonos industriales, que el trabajo avanzado ha propiciado que «haya 104 polígonos» con fibra óptica a los que se sumarán «otros 44 al final de este legislatura».

Todo ello, admitió, prosiguiendo una labor en la que se siguen detectando ‘islas blancas’ -zonas sin cobertura- en las que hay que intervenir para garantizar la conectividad procurando, eso sí, «la ayuda de fondos estatales». Y es que la comunicación real debe llegar a todos los puntos, por ello citó a la Diputación provincial como interlocutor esencial para dotar «a los más de 900 pueblos de la región cuenten de, al menos, un punto donde poder conectarse a la red» porque en ese objetivo del 100% «lo principal es ver si se puede llegar». Para ello, nada mejor que un presupuesto que ronda los siete millones de euros.

En este punto, recordó la responsable regional que «ya se han invertido más de 24 millones de euros» en lo que va de legislatura para instalar un total de 272 antenas en toda la Comunidad Autónoma.

Fijando el trabajo en unos años en los que se está viviendo «un verdadero salto» en el acceso a las nuevas tecnologías de la comunicación, Agustina García Élez se comprometió a continuar trabajando «para reducir la brecha digital de manera real» asegurando «la implicación de este Gobierno en la materia».

Y puesto que el entorno universitario así lo requería , la consejera de Fomento se refirió a la importancia de «desplegar la banda a todas las escuelas» de la región para instar una «forma de educar» adaptada a las nuevas demandas formativas. De hecho, destacó que la comunicación llegará, a través de una dinámica en red, «a 1.025 centros y a 300.000 alumnos».

Con respecto a la necesidad de «buscar una conectividad rápida, buena y segura» que haga que «nuestras empresas sean competitivas», quiso García Élez marcar el reto de «luchar para conseguir beneficiar a los empresarios y a la población». No en vano, acreditó la mejora de la administración digital y la disposición de los servicios comparando que mientras en 2015 se tramitaron 8.500 expedientes con firmas electrónicas, el pasado 2018 la cifra llegó a las 200.000 firmas. Un incremento que «hay que continuar» porque el camino se presenta largo porque, hasta la fecha, la estadística confirma que el 68% de los ciudadanos dice utilizar la red para relacionarse con la administración pública». Un porcentaje que, si bien no está mal teniendo en cuenta la trascendencia del cambio, es todavía bajo en una cultura social que no se adivina ya sin las virtudes de una comunicación global y abierta.