El Instituto de EducaciónSecundaria obtuvo dos galardones en la vigésima edición de los premios San Viator de Investigación en Ciencias y Humanidades, certamen que organiza el colegio San Viator de Madrid y cuenta en su jurado con miembros del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y prestigiosos catedráticos, entre otros.
El profesor Alfredo Alcahut Utiel fue el coordinador de los dos proyectos premiados, realizados ambos por alumnos de segundo curso de ESO. El primero de ellos, realizado por 13 alumnos y denominado El mimo: en busca del género perdido, obtuvo el Premio Nuevas Tecnologías (600 euros, patrocinado por el Grupo Editorial SM).El segundo, Estudio sobre cuevas-despensa y cuevas bodega en La Mancha Oriental (comarca de La Manchuela), fue realizado por siete alumnos y obtuvo el segundo premio del nivel dos de Humanidades (400 euros).
Con estos reconocimientos, son ya 11 los galardones que ha obtenido el centro educativo madriguerense en el certamen San Viator, desde que comenzase a participar en 2005. Historia, humanidades, calidad y creatividad o nuevas tecnologías son algunas de las categorías en que participó.
El profesor que coordinó ambos estudios explica que el que aborda el mimo surge de la constatación de que «a estas alturas de la historia de la literatura universal aún quedan géneros por descubrir o reivindicar, géneros menores, por supuesto, pero que han tenido una enorme importancia en tiempos en los que la transmisión de la literatura corrió serio peligro. Nos referimos, en concreto, al mimo grecolatino. Es tal el desconocimiento sobre este género teatral que muchos temas de literatura lo despachan con un párrafo, cuando no lo omiten, y que durante casi 1.000 años compitió con la tragedia y la comedia, y en los 1.000 siguientes fue el único género teatral superviviente».
El trabajo contó con tres apartados. El práctico fue «el más ambicioso pues se trataba de, partiendo de las lecturas de los mimos y de experiencias teatrales previas, reelaborar los textos y la trama de los dos mimos de Noheda».
Sobre las conclusiones, explica Alcahud que «el resultado es muy interesante, que sintetizamos en una conclusión consensuada: «el mimo fue muy importante en la antigüedad, su influencia perduró tanto que influyó en el origen del teatro moderno, especialmente la comedia. y que hay mucho que descubrir sobre él».
En cuanto al trabajo sobre las cuevas de la zona, se realizó «porque es un tema muy interesante y no había ningún de estudio de este tipo» y se centró «en las localidades a las que acuden los alumnos de nuestro centro: Cenizate, Golosalvo, Madrigueras, Mahora, Motilleja y Navas de Jorquera». «Hemos revisado libros de historia, folletos turísticos, libros sobre geografía, arte y turismo comarcal y regional, pero ante la escasez de datos, hemos recurrido a la documentación oral», añade Alcahut.
Entre las conclusiones del estudio, los alumnos se preguntan qué uso se podría dar en el futuro a estas infraestructuras de la arquitectura rural. «Como sótano, como almacenes; para guardar alimentos de forma más natural; para un uso turístico y cultural, haciéndolas visitables dentro de una ruta histórica o etnográfica local o en relación con el turismo gastronómico o el enológico; o para regular térmicamente la casa mediante rejillas de respiración, que refrigerarían en verano y elevarían la temperatura en invierno, pues las cuevas siempre están entre 15 y 18 grados», son sus propuestas.
MENCIÓN DE HONOR PARA VILLAMALEA
El IES Río Cabriel de Villamalea, otro centro habitual en el palmarés de los premios San Viator, también obtuvo un reconocimiento en esta vigésima edición. Fue una mención de honor en Humanidades, de 150 euros, por el trabajo The yellow brick road. Lanabel’s journey (El camino de baldosas amarillas. El viaje de Lanabel). Realizaron el trabajo Carmen Navarro Martínez y Yeray Tarancón Salmerón, alumnas de tercer curso de Eso, con la coordinación del profesor Enrique Carrasco González.
Se trata de un cortometraje en inglés, basado en el célebre El mago de Oz. Los actores y actrices participantes, todos ellos alumnos, convivieron con marionetas elaborados en las clases de Plástica. Además del idioma, también se trabajaron la interpretación, la expresión corporal y el uso de la tecnología, mediante la edición en vídeo, según explicaban los responsables del proyecto a La Tribuna de Albacete cuando comenzaron el trabajo. El pasado curso ya se llevó a cabo otra iniciativa similar, titulado On the hole, que le valió mención especial a los alumnos Roberto Peñarrubia y Raquel Picazo, así como al mismo profesor. Llegó a proyectarse en el cine Fernández de Villamalea.