Real Madrid y Atlético empataron ayer en el primer asalto de la Supercopa de España tras un partido lleno de nervios e intensidad en el que los goles llegaron en los últimos 10 minutos. James anotó su primer gol con la camiseta blanca y, poco después, Raúl García puso las tablas que dejan abierta la resolución del primer título oficial de la temporada, que será el viernes en el Vicente Calderón.
La primera parte se resumió así: dominio local y ocasiones visitantes. El conjunto rojiblanco enseñó su manual clásico y su rival no encontró el hilo al duelo durante toda la primera mitad.
El cuadro de Ancelotti comenzó el duelo mostrando su ideario, que incluye presión adelantada y manejo del balón apoyado en el buen pie de hombres como Toni Kroos o Luka Modric. Pero la filosofía le duró unos 10 minutos.
El Atlético dio muchas patadas, dobló marcas en las bandas y cerró agujeros por el centro. Y le alcanzó para tirar contras y llegar al área de Casillas sin necesidad de pasar por el centro del campo. A los 14 minutos, Mandzucic probó al arquero y, un minuto después, fue Saúl quien obligó a Casillas a tirarse al suelo para atrapar un balón.
Fue un encuentro serio con dos equipos con muy diferentes propuestas, ambas igual de lícitas. En ese caso, la prosa visitante pudo con el verso local. La escuadra de Chamartín tampoco encontró la inspiración individual de sus artistas y tanto Cristiano como Bale pasaron en silencio toda la primera parte. Tampoco hubo mucho de Karim Benzema, muy vigilado.
En ese escenario, el Atlético es el rey y sabe cómo calentar a la grada rival, que la tomó con el árbitro y los jugadores rojiblancos por las pérdidas de tiempo. Y Miguel Ángel Moyá, el arquero ‘colchonero’, se fue inédito al descanso.
La segunda parte comenzó con noticia, pues se fue Cristiano Ronaldo por unas molestias y entró el colombiano James Rodríguez, quien debutó en el estadio Santiago Bernabéu. Y a los 47 minutos, el Real Madrid realizó su primer disparo entre palos con un duro remate de Bale que sacó Moyá.
El bloque ‘merengue’ encontró ritmo durante cinco minutos, pero su oponente se encargó de volver a cortarlo con faltas y fricciones, justo lo que le interesaba. El duelo se espesó, aunque el ritmo siguió siendo bueno. Y, por descontado, la tensión se mantuvo hasta el final: era un título entre dos enemigos extremos.
Ovacionado. A los 78 minutos entró Di María y la hinchada lo recibió con una clamorosa ovación. Dejó claro que no quiere que se vaya. La presencia del argentino inflamó la grada y el partido.
Dos minutos después llegó el gol del Real Madrid y lo anotó James Rodríguez, que lo celebró enloquecido. Kroos abrió a Carvajal, Benzema se enredó, el balón quedó suelto y el colombiano marcó su primer tanto.
Pero al Atlético siempre le quedará el balón parado para agarrarse a la vida. A tres minutos del final, Koke lanzó un saque de esquina, el balón pasó por un enjambre de piernas y Raúl García empujó a la red desde cerca.
Lo último del partido fue una mano en el área visitante de Mario Suárez que el árbitro no vio. Debió ser penalti, pero así se marchó el encuentro y el viernes, en el estadio Vicente Calderón, se sabrá el campeón. Se promete otro encuentro lleno de nervios.