Cuatro años después de su última edición, celebrada en Talavera de la Reina, el Festival Intercampus de la Universidad de Castilla-La Mancha congregó ayer a miles de estudiantes en el Circuito de Velocidad La Torrecica para disfrutar de una jornada lúdica repleta de música en directo, danza o actividades culturales y solidarias, donde participaron más de 30 artistas.
Tal y como comentaba a La Tribuna de Albacete Cristina Cuevas, delegada de Alumnos del Campus de Albacete, la iniciativa busca reforzar los vínculos entre los universitarios de los diversos Campus de la UCLM, de hecho para propiciar una mayor asistencia la organización facilitaba el transporte a precios realmente asequibles a los estudiantes de otras provincias (un máximo de 10 euros el viaje de ida y vuelta).
El Consejo de Representantes de Estudiantes de la Universidad, organizador del Intercampus 2014, define a éste como «un día grande para todos los alumnos castellano-manchegos», que tuvieron la oportunidad de participar en un amplio programa de actividades y de relacionarse con compañeros de otros Campus.
«Podría definirse como un reencuentro entre los universitarios para compartir momento lúdicos e iniciativas culturas, porque, al haberse concebido la UCLMcomo un espacio multicampus, con Campus separados, es una buena ocasión para reunirnos alumnos de todos ellos», añadía Cristina Cuevas.
Después de la apertura de puertas, el programa arrancaba poco antes del mediodía con un precalentamiento de animación de zumba y con la intervención de varios DJ’s. La masiva afluencia de jóvenes al Circuito de Velocidad de La Torrecica tenía lugar a partir de las 17 horas, cuando arrancó la actuación de Les Castizos y una animada master class de zumba en el segundo escenario habilitado por la organización en el recinto.
La soleada tarde acompañó y muchos asistentes se reunían buscando algo de sombra en la puerta del Circuito para comenzar un improvisado botellón, que fue congregando a cientos de jóvenes a lo largo de la tarde.
Entretanto, el pop-rock de la banda local La Pantera Rosa, iniciaba, hacia las seis de la tarde, el amplio cartel de actuaciones en directo, entre las que destacaron como cabezas de cartel las bandas Benito Kamelas o Trashtucada y donde también dieron lo mejor de sí los DJ’s Nano o Bob García.
Ese ambiente distendido que caracteriza al Intercampus se vivió ayer de nuevo elCircuito y el trasiego de jóvenes era incesante, la mayoría de ellos nos confesaban las ganas de vivir esta experiencia, porque era su primera vez. Era el caso de la joven Gloria Buitrago, del Campus de Ciudad Real, que aseguraba estar pasándolo en grande pese que había perdido el teléfono móvil. María Martínez, estudiante de Ingeniería en el Campus de Albacete, también se mostraba encantada de asistir al festival -«porque el año en que íbamos a asistir se anuló», explicaba-al igual que Andrés Jiménez, estudiante Magisterio.
Por su parte, Isabel María, estudiante de Aviónica, confiaba en que el recinto fuera llenándose poco a poco y comentaba la elevada temperatura de primera hora de la tarde «y eso que decían que iba a llover», bromeaba.
Fuentes de la empresa organizadora, Aldachu, confirmaba a este diario que en el último recuento se habían contabilizado 2.300 entradas vendidas, por lo que cifraron en unas 3.000 personas la afluencia total. Entre los asistentes era evidente que había ganas de Intercampus, tras haberse suspendido la cita a última hora hace año y medio en Cuenca, y la música sonó hasta pasadas las cinco de la madrugada.
Paralelamente, y en esa línea de recuperar la socialización y el espíritu universitario, también se sucedieron iniciativas en este Intercampus 2014, como la venta de camisetas, a dos euros, con el lema Enamorados de la Universidad pública y de calidad, objetivo reivindicado por el Consejo de Representantes de Estudiantes y cuya recaudación irá al Fondo de Rescate Universitario; la recogida de productos básicos para donarlos al Banco Central de Alimentos y la recaudación de material escolar con destino al Sáhara, merced a un convenio suscrito por el Campus de Ciudad Real.
Debido a las limitaciones financieras de la propia Universidad de Castilla-La Mancha, el certamen tuvo que ser costeado por una empresa privada (el presupuesto del mismo se cifra en más de 80.000 euros) y, al no contar con ningún tipo de subvención, fue ésta la que marcó los precios (15 euros venta anticipada y 18 en taquilla).