Firmó un seguro de daños sobre la vivienda de alquiler en la que residía, y pocos días después, tras sacar todas sus cosas, prendió fuego para conseguir así cobrar la póliza de la aseguradora. Esa es la acusación que la Fiscalía hace a una mujer que de prosperar la solicitud de la acusación podría cumplir 12 años de cárcel por el delito de incendio y cinco meses más por estafa. Asimismo, se pide que indemnice a la dueña del piso en 8.454 euros, más casi otros 3.000 en los daños del mobiliario, y otros 280 por los gastos de intervención de los Bomberos.
El juicio está fijado para el próximo martes en la sección Primera de la Audiencia Provincial. Según figura en el relato de los hechos, el 9 de febrero de este año y en una compañía de seguros, la acusada se hizo pasa por la dueña del piso que tenía alquilado, y suscribió un seguro de daños materiales ocasionados por incendio, con unas coberturas de más de 92.000 euros por mobiliario y daños materiales.

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