Son malos tiempos para la lectura en general y para los libros en particular. Sin embargo, hay una forma de llegar a los lectores que se va incrementando a pasos agigantados desde hace unos años: los libros electrónicos. Tanto por lo que respecta a su publicación y a la oferta de las empresas editoriales, como por la forma de descargas por internet de manera legal. Y en este aspecto, uno de los escritores españoles punteros es el albacetense Ricardo Espín Bueno, que está sumando día a día cifras que para sí quisieran la mayoría de sus colegas, consagrados incluidos, por supuesto.

 Así, por ejemplo, este paisano que salió muy joven de su tierra para recalar en Aragón durante algunos años y dos décadas en Gijón para regresar de nuevo a Teruel, donde reside ahora, está incluso sorprendido de que su novela histórica Scriptorium, que lleva más de un año entre las cien más vendidas de su especialidad no sólo se mantenga, «sino que incluso continúa ascendiendo en esta especie de Top 100», cual declara a La Tribuna el autor.

Quien, además, no oculta la enorme aceptación de las descargas de otra de sus novelas Desde mi niñez, que a mitad de esta semana que hoy domingo 14 concluye, y a pesar de que el contador de la página tenía problemas, seguía sumando visitas.

Más información en edición impresa.