Luengo ofrece un concierto en exclusiva para sus paisanos

Emilio Martínez
-

El veterano cantante albacetense adelantó, junto a algunos de sus grandes éxitos, varias canciones incluidas en su nuevo disco, que se atreve a calificar como «el mejor»

El cantante Carlos Luengo, durante la actuación que ofreció en la sede de la asociación ‘Albacete en Madrid’. - Foto: E.M.

Quien tuvo, retuvo. Ya lo dice el refrán. Y uno de los grandes/grandes de la canción popular en los años setenta y ochenta, que no ha dejado de estar en activo ni cantando ni componiendo, lo demostró ampliamente. Además, como una «especie de regalo de Reyes adelantado», como afirmó Carlos Luengo al inicio del magnífico concierto que ofreció en exclusiva el pasado sábado 15 a sus paisanos de la diáspora madrileña, en la sede de la Asociación Cultural Albacete en Madrid, que lo organizó dentro de su ciclo de Sábados Culturales correspondiente al mes de noviembre.

El albaceteño cantó a pelo y sólo se acompañó de su guitarra, sin necesidad de mesa de sonido «ni otros artilugios que muchas veces tienen truco», dijo, para ir desgranando un puñado de temas en mezcolanza de los antiguos, como el casi mítico Yo te quiero tanto, hasta algunos de los que van a formar parte del disco próximo, con producción de otro de los grandes músicos de aquella época, José María Guzmán -quién no recuerda a otro grupo histórico, recientemente reaparecido también, Cánovas, Adolfo, Rodrigo y Guzmán (CRAG), como A tiritar.

Antes, fue presentado por el mandatario de esta embajada provincial en la capital de España, Aurelio Martínez Serrano, que hizo un breve repaso de su biografía personal y profesional, destacando de manera especial «el albaceteñismo de alguien que vivió muy poco años de su infancia en Albacete y que es muy superior al de muchos otros personajes con más años de vivencias en la tierra». Porque Carlos, hijo de un militar del Ejército del Aire oriundo de tierras navarras que llegó para dirigir a Base Aérea de los Llanos, abandonó la ciudad antes de cumplir los 10 años al ser trasladado su padre a Getafe.

«Pero me dio tiempo a empaparme de lo mejor que tiene mi tierra, la gente, algo que se ha quedado en mis genes y de lo que siempre he presumido», apuntó el cantautor recibiendo la primera de las ovaciones del día. Máxime cuando añadió que después siempre exigía en sus giras que no faltara no sólo Albacete y la Caseta de los Jardinillos en Feria -«debo tener el récord de conciertos allí», señaló- sino los pueblos más importantes de la provincia: «Y también he ido por razones particulares, entre otras, para visitar a los muchos amigos que tengo».

Tras lo cual, comenzó su actuación,  dejando claro que en su opinión este disco nuevo «es el mejor, con diferencia, de todos» los muchos que ha grabado, justificándolo así: «Está claro que si fuera uno más, me habría quedado en mi casa para sopitas y buen vino y no lo habría grabado, que bastante tengo con los antiguos y no quiero engañar a nadie; pero, claro, ahora soy mejor compositor en letras y música y no quería que las canciones se quedaran en un cajón, porque los artistas de la rama que sea buscamos que lo nuestro sea conocido».

Próxima actuación. Agregó que ya tiene acabadas, en letra, música y arreglos, más de 30 canciones, de las que ha elegido las nueve que van a ir en el disco junto a algunas antiguas en nuevas versiones. Un disco que saldrá a la venta a primeros de año, momento en el que empezarán los conciertos de presentación -el primero en la mítica sala Galileo, de Madrid- para recorrer varias importantes ciudades. Y, claro, Albacete, que es la que por ahora más le interesa. «Para mí, será la actuación más importante, como esta de ahora en exclusiva ante mis paisanos», destacó.

No negó que, aparte de las composiciones, también se encuentra en plena forma de voz, como demostró a lo largo de este recital, en el que la dicción, los graves, los agudos, las subidas y bajadas de tono y las inflexiones fueron perfectas. Tanto como el acompañamiento con una guitarra que lleva con él desde hace décadas y que utiliza también parta componer temas casi a diario, lo que hace que crezcan de continuo y tenga a falta de pequeños detalles otra treintena, con las que dijo «amenazar para nuevos discos, jaja».

A lo largo de una hora, y entre los aplausos de los paisanos, que fueron mayores en las antiguas, que llegaron a tararear o cantar a coro el estribillo, aparecieron Para ti, La educación, Yo no sé, Sola, Sí señor, Romántica -que popularizó José Vélez y con la que sigue triunfando por Hispanoamérica-, Closed -en inglés, Me faltas tú esta noche, Que no me has dicho nada y un largo etcétera, incluyendo dos vises, el último de nuevo con Yo te quiero tanto, que puso al público en pie bailando y con gritos de «bravo, bravo».

Después, tal como había prometido y a pesar de que ya se había rebasado el tiempo previsto, entró en un coloquio con los asistentes, que le asaetearon cariñosamente a preguntas. Entre ellas, la de si en sus canciones era todo personal: «No siempre las historias me han pasado a mí, pero en un 90% son hechos reales de contemplar la vida propia y la de los que me rodean en cada momento. De ahí que muchas personas se identifiquen con lo que canto cuando las escuchan en directo o en el disco».

También contó varias anécdotas de su estancia en Londres como camarero, donde empezó a cantar antes de iniciar esa carrera que le llevó a ser número uno en todas las listas e incluso a presentar programas didáctico musicales en TVE. Y se atrevió a hacer una propuesta «a quien quiera escuchar, que, por supuesto, son los poderes públicos de Castilla-La Mancha», precisó. Le gustaría que dado el altísimo número de artistas de la región de fama nacional e internacional, «no sólo cantantes, también gente como los humoristas de Muchachada Nui», se organizara con carácter anual un encuentro con todos ellos para disfrute de los paisanos y envidia de otras regiones.

Como es lógico, esta idea fue rubricada con más aplausos prácticamente unánimes de todo el público presente. Entre otros, varios destacados paisanos como los economistas Patricio Morcillo y Augusto Huéscar, el escritor Juan Pedro Carrasco, la actriz, productora y directora de cine Tina Olivares y el historiador y musicólogo Luis Leal. Destacando también la presencia de Julián García, director del Club de Tenis Albacete, forofo y amigo de Luengo, que se desplazó expresamente desde la tierra.