El 35% de los médicos colegiados de la provincia de Albacete activos de 55 años se jubilará previsiblemente en los próximos 10 años, una situación que podría hacer «inviable -según denuncian desde el Sindicato Médico de Castilla-La Mancha- el sistema sanitario público de salud», ya que la reposición de los médicos que se jubilan no está equilibrada con el número de profesionales que se están formando en estos momentos, ni tampoco es equitativo por las distintas especialidades.
En concreto, según datos facilitados por el Colegio Oficial de Médicos de Albacete, de los 2.000 facultativos colegiados al cierre de 2018 -y que por tanto están ejerciendo la Medicina en la provincia-, 526 tienen entre 55 y 64 años, a los que se suman otros 143 que tienen entre 65 y 69 años, lo que significa que 669 del total, es decir, una tercera parte de los profesionales de la Medicina que están en activo están próximos a jubilarse o incluso alguno lo hará este año, dado que a diferencia de otras profesiones, los médicos al menos en lo que a Castilla-La Mancha respecta no tienen obligación de jubilarse a los 65 años, sino que en algunos casos pueden prolongar su vida laboral hasta los 70 años, salvo los que cumplieron esa edad durante la etapa de Gobierno en Castilla-La Mancha de María Dolores de Cospedal. Su ejecutivo, a través del Plan de Recursos Humanos, obligaba a todos los profesionales sanitarios a jubilarse a los 65 años, pero que vía recurso interpuesto por el actual Gobierno de Emiliano García-Page en 2015 esta medida se anuló.
Según el vicesecretario del Sindicato Médico de Castilla-La Mancha (CESM) y a su vez presidente del Colegio Oficial de Médicos de Albacete, Fernando Gómez Bermejo, esta situación futura que se puede plantear es fruto de una descoordinación entre el Ministerio de Sanidad y el de Educación a la hora de sacar la oferta de plazas de médicos internos residentes (MIR) cada año.
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