La vidriera del rosetón de la Catedral de San Juan Bautista ya ilumina el interior del templo y realza el conjunto donde está ubicada. Los trabajos de instalación de la obra concluyeron ayer a mediodía, horas antes de lo previsto, tras el ajuste de las distintas  piezas por parte de los operarios, un trabajo siempre supervisado por la propia creadora de la obra, Pilar Belmonte.

Tanto la artista albacetense como el párroco de San Juan, Julián Ros, se mostraron plenamente satisfechos del resultado final de una obra a caballo entre el simbolismo y la abstracción figurativa.

Belmonte, que consideró «un orgullo haber podido hacer una obra de este tipo en mi tierra», reveló a este diario que «el proceso de elaboración de la vidriera se ha prolongado por espacio de un mes en el taller germano de Derix, donde un equipo de siete u ocho personas ha trabajado en las distintas vertientes del proceso: elaboración de plantillas, cortes de vidrios, pintura, grafismos, tratamiento de ácidos, fijación de las pinturas de esmalte en hornos, laminados y soldaduras».

En cuanto a los elementos iconográficos, la artista aludió a las tres palomas que representan el Espíritu Santo y la Santísima Trinidad; las espigas y el vino que representan el cuerpo y la sangre de Cristo, los dos racimos de uva que representan a los 12 apóstoles y los 10 mandamientos; las 12 estrellas de la corona de la Virgen de los Llanos en piezas de vidrio más grueso;y el fragmento de un  pentagrama musical del Ave María de Schubert y  el comienzo del himno de la Patrona de la ciudad, aunque en los 16 paneles se incluyen también mucho espacios más cercanos a la abstracción.

La elección de los tonos fríos, donde predominan azules, verdes y violetas, responde a la intención de la artista de ofrecer una luminosidad no exagerada, dado el tono de las pinturas de las bóvedas y el abigarrado lienzo mural.

Gran sentido simbólico. Por su parte, Ros subrayó que «cumple con el sentido simbólico que tiene el rosetón en la Catedral, la gran entrada de luz hacia el templo, porque la luz en la Biblia representa la imagen de Dios, lo que despierta también entre los fieles las ganas del encuentro y la mirada hacia el Padre».

La luz cenital que incidía a mitad de la tarde sobre el rosetón provocó un espectacular efecto luminoso en la nave central de la seo, aunque como comentaba el párroco será digno de apreciar las impresiones que produce a lo largo del día, e incluso con el cambio de las estaciones.

El importe de la obra (42.000 euros) será financiado a través de donaciones particulares, de hecho el párroco de San Juan comentaba a La Tribuna de Albacete que ya se lleva recaudado la mitad aproximadamente de ese importe y llamaba a la colaboración de los feligreses.

Una vez haya retirado el andamio donde se han llevado a cabo los trabajos, durante las próximas semanas está previsto que se inicie el montaje del órgano histórico, que ha sido restaurado en un taller de Teruel. «Esa labor requerirá todo un proceso de armonización y aclimatación a la humedad y temperatura del recinto, por lo que el concierto conmemorativo previsto con motivo de los 500 años del inicio de las obras de la iglesia no tendrá lugar hasta el mes de septiembre, coincidiendo con la Feria», concluía Ros.