MIR con los deberes hechos

TERESA ROLDÁN
-

Ocho alumnos de la Facultad de Medicina albacetense se encuentran entre los 150 con las más altas calificaciones del examen de acceso a una plaza de formación sanitaria de entre 12.400 que en toda España optaban a un puesto

Que nuestra Facultad de Medicina es una de las que mejor prepara a sus estudiantes para las pruebas de acceso a una plaza de formación sanitaria especializada, no es algo nuevo. De todos es sabido que prácticamente desde que los futuros médicos entran en las aulas de la facultad albacetense son formados para este importante paso de cara a su futuro laboral. Los datos de los últimos años así lo corroboran y los resultados de los últimos en examinarse, el pasado 6 de febrero, no iban a ser una excepción.

El cien por cien de los que concurrieron a las pruebas MIRde la Facultad de Medicina de Albacete, superó el examen, aunque no todos, unos 95 estudiantes, han podido optar a la plaza de la especialidad que deseaban. Además, entre los 150 MIRque mejores notas han obtenido a nivel nacional tenemos a ocho estudiantes de la Facultad de Medicina de Albacete, todos ellos por cierto, a excepción de dos (de Toledo y Cuenca), son naturales de Albacete.

David, Teresa, Cortes, Manuel, Víctor, Paco, Marcos, Carlos, Joaquín, José Miguel, Iván, Lucía son algunos de los licenciados de Medicina mejor posicionados por sus calificaciones en los exámenes MIR. Todos han podido elegir ya la plaza que querían en la especialidad y hospital en el que finalmente se han decantado, aunque los criterios de elección de cada uno de ellos son variados.

Están entre los últimos licenciados de la Facultad, porque la promoción que acaba en junio será la primera que obtiene el Grado. Les une  por encima de todo es su pasión por la medicina, además de los seis años de estudios que han pasado juntos y el recuerdo común del examen MIR. «En general todos salimos con una sensación rara», señala David Serrano, el MIRque ha obtenido el puesto 36  de entre 12.400 aspirantes a una plaza de formación que concurrieron este año. Serrano lo tenía claro no quería hacer su período de residencia en un gran hospital  ni en una gran ciudad como Madrid o Barcelona, por eso le atrajo la que ha sido su elección, el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, en Santander, y su servicio de Cardiología, que es uno de los más potentes del país.

Muy distinta ha sido la opción de Cortes Jiménez, la tercera mejor nota de los alumnos salidos de la Facultad albaceteña, que eligió  la especialidad de Endocrinología y el servicio del Hospital de Albacete. «Es una decisión muy meditada, pero al final ha primado la formación, y Albacete tiene un programa formativo excelente y muy buenos docentes, por eso decidí quedarme aquí, al margen también de otros motivos personales», agrega la joven, que asegura que lo que más le gusta por encima de todo «es el trato directo con los pacientes».

La decisión de Marcos Sánchez, el MIR 145, difiere de sus compañeros. Hará las maletas en unas semanas para trabajar y formarse durante los próximos años en Madrid, en concreto, en el Hospital Doce de Octubre, donde se ha decantado por la especialidad de Medicina Interna. Su criterio de elección era un hospital que tuviera mucha población y relativamente marginal, la del sur de Madrid, «donde voy a tener la oportunidad de ver muchos casos de VIH, ya que es el campo de las enfermedades infecciosas en el que quiero especializarme».

Todos sin excepción consideran que la carrera se puede llevar «pero si tienes la mente de un corredor de maratón». Es cuestión de ser constante y organizarse para poder compaginar los estudios con la vida personal.