En plena negociación sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, seis presidentes regionales, tres de ellos del PP y otros tres del PSOE, entre ellos, el presidente de la Junta, Emiliano García-Page, se reunieron en Zaragoza, pusieron sobre la mesa la necesidad de que exista solidaridad interterritorial, pidieron al Gobierno que se «haga justicia con sus comunidades, con su demografía, su despoblación, su envejecimiento y su dispersión», y reclamaron mayores medios económicos para hacer frente a los servicios públicos básicos de Educación y Sanidad, reconociendo su coste real. 

 Según la Constitución, todos los ciudadanos tienen derecho a acceder a los mismos servicios públicos vivan donde vivan, pero la España de interior se queda vieja y sin habitantes y esto hace que se dispare la cobertura educativa y sanitaria que se presta al tener que mantener aulas en el medio rural con tres alumnos, como es el caso de la pedanía de Fuentealbilla, Bormate, o tres consultorios con menos de 30 tarjetas sanitarias en la zona básica de salud de Balazote. 

 El 73% de la población albacetense reside en los seis mayores municipios de la provincia, mientras que el otro 27% restante de su población se reparte entre 81 municipios de los 87 que hay. Sólo entre 2008 y 2017 ha perdido 7.469 habitantes y en zonas como las dos sierras, las del Segura y la de Alcaraz y Campo de Montiel, su densidad es de 7,5 habitantes por kilómetro cuadrado. Por debajo de 10, se habla de ‘desierto demográfico’.

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