La Consejería de Fomento adjudicó recientemente las obras de mejora del firme, drenaje y señalización de un tramo de 20 kilómetros en la carretera CM-3216, entre las localidades serranas de Vianos y Paterna del Madera.

Este es uno de los proyectos de mayor coste de entre los que el Ejecutivo regional había anunciado en su Plan de Inversiones 2013-15 para la provincia. Finalmente ha sido la empresa Álvaro Villaescusa SA la adjucataria por un precio de algo menos de dos millones de euros (1.984.400), unos 250.000 por debajo del presupuesto base estimado.

La complejidad de los trabajos a realizar hace que tengan un plazo de ejecución de 14 meses, con lo que está previsto que concluyan en el primer trimestre de 2016. Servirán para resolver los problemas de uno de los tramos más deteriorados de la red autonómica de carreteras en Albacete, donde se corona el puerto del Barrancazo, a 1.428 metros de altura.

La CM-3216 es una carretera de 63 kilómetros que une las sierras de Alcaraz y Segura, desde Alcaraz hasta Ayna, y que sufre especialmente los efectos de fenómenos meteorológicos extremos, como nevadas, viento y hielo. Por ello, han sido tónica habitual los trabajos de reparación y, como ejemplo, los realizados este año entre Paterna del Madera y Bogarra, donde un desprendimiento dejó inutilizado un carril durante cerca de un año.

Tal y como recoge el proyecto de la empresa contratista, «desde el punto de vista técnico, la solución ideal sería proceder al acondicionamiento general del tramo, con modificaciones del trazado tanto en planta como en alzado». Descartadas esas actuaciones por el elevado coste económico, y según las recomendaciones de la Dirección General de Carreteras, se ha optado por «una solución que permita garantizar la continuidad del tráfico, mejorando las condiciones de rodadura, el drenaje superficial y reforzando la señalización vertical y especialmente el balizamiento y la colocación de barreras de seguridad, muy deficiente en la actualidad».

Para ello, los trabajos a realizar serán, entre otros, la limpieza de las cunetas, excavación de apertura para nuevos tramos y revestido de hormigón donde proceda; excavación en taludes de desmonte; regularización y refuerzo del firme; una nueva capa de rodadura y el relleno y recrecido de bermas (espacios nivelados) para evitar escalones laterales.

Con ello, se pretende reforzar la seguridad y evitar las intervenciones casi permanentes de las brigadas de conservación, dada la degradación actual.