Como adelantó este diario en la edición de ayer, Juan Carlos Marín, hasta ahora concejal de Izquierda Unida y actualmente miembro no adscrito de la Corporación local, ha remitido un comunicado a través del cual profundiza en los motivos de la decisión adoptada.
Tras recordar que desde hace tiempo se viene produciendo un proceso de apertura de las estructuras orgánicas de IU a la idea de la convergencia con todo movimiento cívico, ecologista y plataformas ciudadanas, entre otros colectivos, expone que no en todos los lugares es posible llevar adelante el referido proceso.
Sigue manifestando que se han realizado largos y denodados intentos para que dicha renovación se produjese en la asamblea de IU en Hellín, tras el incumplimiento de algunos acuerdos adoptados en el citado organismo local, así como negativas sistemáticas a poner en marcha procesos de conversaciones con otras entidades que posibilitasen las condiciones necesarias para alcanzar la mayoría social y política para cambiar la situación del Ayuntamiento local y superar el bipartidismo.
Recuerda después los continuados esfuerzos para hacer efectiva la incorporación en igualdad de condiciones de los simpatizantes e independientes al trabajo de la asamblea y afirma que «existe una obstinación en no proceder a la renovación por parte de las personas que, incumpliendo los principios que inspiran la filosofía y actuación de IU, se aferran a sus cargos públicos, sin dar cumplimiento a los acuerdos tomados por la asamblea local al respecto».
Renovación ficticia. «Después de comprobar que lo que aparentaba ser una renovación era más ficción que realidad, pues las consignas que sirven para orientar la toma de decisiones siguen emanando de las mismas personas, aunque figuren otras -continúa Marín- tras la asamblea celebrada el pasado día 15, un grupo de afiliados entendemos que los referidos esfuerzos y trabajo para la transformación de IU de Hellín no están obteniendo el respaldo y los resultados adecuados, ante lo que hemos decidido abandonar la afiliación a IU, al considerar imposible el avance de las ideas que proponemos y que sí salen adelante en otros lugares». El comunicado finaliza indicando que «es necesaria la renovación de personas que han hecho de la política una profesión» y afirma que la asamblea local de IU en Hellín «está dividida y rota».