China es uno de los mercados más potentes en la actualidad. Sus millones de ciudadanos consumen, cada vez más, productos llegados del exterior, lo que se convierte en una auténtica oportunidad para las empresas albaceteñas, que todavía tienen una cuota de negocio restringido en este destino.Hasta el mes de mayo, y desde el inicio del 2017, las ventas desde nuestra provincia al gigante asiático apenas sumaban los 6,7 millones de euros, de los 62,8 millones de euros contabilizados en toda Castilla-La Mancha, lo que evidencia también un aún incipiente volumen de ventas en este enorme mercado exterior. Muy lejos, por ejemplo, del principal comprador de productos y bienes de esta región, Portugal, que en ese mismo periodo ya había adquirido por importe de 513,1 millones de euros.En el caso de Albacete, además, se produce un fenómeno paradójico. Es una de las provincias de la comunidad autónoma con más empresas que exportan a China pero, en términos de ventas, la que menos factura.