Es una imagen típica de las tardes de verano en determinadas zonas de la capital, caso del Parque Lineal o el Barrio San Pedro (a la espalda del Centro Comercial Los Llanos) y en no pocos municipios de la provincia: los grupos de jugadores de petanca que practican su deporte preferido cuando comienza a descender el sol.
Se trata de una disciplina que mezcla reflejos, estrategia, destreza, psicología, y tenacidad, propiciando en quien la practica un tono físico muy recomendable para personas de cierta edad y altas dosis de socialización. Sus orígenes se rematan muchos siglos atrás en el tiempo, con claras referencias en las civilizaciones griega y romana, aunque el moderno deporte de la petanca surgió en Francia, a principios del siglo XX,y fue extendiéndose con notable popularidad por todo el arco mediterráneo y por el centro europeo, tal y como desvela a La Tribuna de Albacete el presidente del Club de Petanca Parque Lineal, José Antonio Navarro, que anteriormente también dirigió el Club dePetanca del Barrio San Pedro.
Aunque la afición continúa muy viva, el número de inscripciones federativas ha experimentado un brusco descenso en los últimos años a consecuencia de la crisis económica, tal y como comenta Navarro. «En el Club Parque Lineal hemos pasado de cerca de 50 a sólo 12 socios, porque la mayoría de los aficionados están en paro y viven con una pequeña ayuda, por ello no pueden permitirse el coste de la ficha, cuota del club, viajes, inscripción en campeonatos... a todo esto se suma que no hay ayudas por parte del Ayuntamiento ni de la Federación Castellano-Manchega, por ello la petanca como deporte está decayendo mucho en Albacete, sobre todo pervive como reuniones de amigos para compartir esa afición y pasar el tiempo».
El presidente del Club de Petanca Parque Lineal considera que, por el contrario, la afición ha crecido en muchos pueblos de la provincia, caso de La Roda, Minaya o Tarazona de la Mancha y desvela que las edades en que más se práctica iría de los 40 a los 75 años, «aunque nosotros tenemos ya jugadores a partir de 14 años y también se aprecia un aumento en el número de mujeres, algunas con un gran nivel».
Preguntado por el número de personas que jugarán a la petanca ahora mismo en la ciudad, Navarro matiza que ha disminuido bastante. «En la actualidad habrá un centenar de jugadores entre los tres clubes que existen, el Parque Lineal, San Pedro y Sepulcro-Bolera, hace unos años esa cifra se multiplicaba por tres, concretamente nosotros llegamos a organizar torneos de feria en los que se inscribieron hasta 300 parejas, pero entonces el Ayuntamiento nos concedía una ayuda de 3.000 euros y ahora sólo nos da 600».
El fundamento del juego es simple: se trata de tirar una bola lo más cerca posible de un objetivo que suele llamarse boliche o bolín y los adversarios pueden ser dos (uno contra otro) o por equipos de dos contra dos (dupletas) o tres contra tres (tripletas). Las partidas suelen jugarse a 13 puntos en terreno libre o bien dentro de una pista delimitada (la oficial tiene 15 por cuatro metros).
Navarro alude a que la constancia es esencial en esta disciplinas y estima en que un buen jugador debe dedicarle unas dos o tres horas diarias para adquirir un buen nivel, «hay que tener técnica, reflejos pero también utilizar mucho la cabeza para saber llevar bien la evolución del juego».
Finalmente, destaca que los meses de verano son especialmente propicios para jugar a la petanca, «por ejemplo algunos sábados o domingos podemos reunirnos alrededor de 100 personas cuando se organiza algún campeonato».