Con el estreno de los nuevos barones de Baleares, Miquel Vidal, y de Valencia, Isabel Bonig, la plana mayor del PP, en cuanto a regiones y provincias se refiere, se reunió ayer para trazar las líneas maestras de unos meses que se presentan muy movidos por dos citas electorales: Cataluña, el próximo 27 de septiembre; y generales, a finales de año, pero sin fecha concreta. Al frente de la cita, el presidente del Gobierno y del partido, Mariano Rajoy, quien reclamó a los suyos la necesidad de que estén «permanentemente en la calle» para tratar de remontar los malos resultados obtenidos en los comicios regionales.
Flanqueado por la número dos de los populares, María Dolores de Cospedal y por cuatro de los vicesecretarios (Fernando Martínez Maíllo, Javier Arenas, Javier Maroto y Pablo Casado), el líder de la formación conservadora pidió a sus dirigentes que se acerquen a la ciudadanía con un discurso «más directo» para dar a conocer la «gran» tarea realizada en estos cuatro años de Gobierno, a pesar del peso «de la herencia recibida».
Según explicaron varios presidentes provinciales del PP al término de la reunión, Rajoy hizo hincapié en los tres puntos claves de su legislatura: la recuperación económica y la creación de empleo, las políticas sociales y la regeneración política. «Hay que contarle a la gente que nuestra formación ha conseguido que este país esté mucho mejor y haya más personas trabajando», resumió una de las noveles en estos encuentros, la nueva presidenta popular en Valencia, Isabel Bonig.
En este sentido, remarcó que, tras los resultados electorales del 24 de mayo, la formación ha «tomado nota» y ahora «todos remamos en la misma dirección». «En las próximas elecciones generales nos jugamos la estabilidad, la prosperidad y el futuro de todos. Eso merece la pena frente a algunos partidos de la izquierda radical que con tal de desalojar al PP de las instituciones son capaces de pactar con cualquiera», señaló.
proyecto con resultados. En términos parecidos se expresó el expresidente de La Rioja Pedro Sanz que señaló que esta reunión demuestra que los populares están «preparados para afrontar las próximas elecciones desde un proyecto político que está empezando a dar resultados».
En este sentido, el líder del PP de Melilla, Juan José Imbroda, reconoció estar «encantado» con la nueva cúpula del partido: «Salimos con las ideas muy claras. Hemos hecho muchísimas cosas buenas y están dando sus frutos. Así que ahora estamos para ascender, porque ya pasó lo malo. Estamos muy esperanzados, porque lo mejor todavía tiene que llegar para el PP».
Al contrario que en cónclaves anteriores, en la cita en Génova se oyó la voz de Rajoy, pero también la de la secretaria general, la de los vicesecretarios presentes (solo faltó la responsable de Estudios y Programas, Andrea Levy, recién nombrada número dos de la candidatura popular en Cataluña) y la de algunos barones que quisieron dar su opinión sobre la cuestiones tratadas. Una circunstancia que, según algunos de los presentes, evidencia un «cambio fundamental» en la formación.
LOS PRESUPUESTOS. Esta cita tuvo lugar apenas dos días antes de que se apruebe el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2016. El Gobierno prepara unas cuentas con inversiones territorializadas para recuperar terreno antes de las elecciones generales y, por ello, Rajoy quiere que el PP se emplee a fondo en explicarlas. Así, pidió a los suyos que, a partir de septiembre, se vuelquen en vender en sus respectivas provincias las mejoras que recogerán los presupuestos públicos.